LO QUE CUENTAN LOS ABUELOS - PARTE 2

EL HOTEL MODERNO DE DON TEMER JACOBO

Temer nació un 12 de septiembre de 1899 en Damasco – Capital de Siria (al igual que Julio Tarazi).




Cuando se instala en Quines pone un almacén de Ramos Generales en la esquina de 25 de Mayo y Moreno donde actualmente tiene el salón comercial el Sr. Germán Iruela. Aproximadamente en el año 1929 o 1930.
Afirma "Lito" que el primer expendio de combustible lo tuvo su papá. Era de YPF y en la fotografía se puede apreciar la altura del mismo. Se bombeaba combustible hasta llenar el tuvo de vidrio y luego se abría una palanca y por decantación ingresaba el combustible en los vehículos.


Don Temer posa frente al surtidor y está cargando combustible a un vehículo cuya patente reza “Monte Maiz”. De fondo se puede apreciar al Hotel Magnano que como bien dice don Alfredo Giménez : “ la esquina tenía solamente planta baja, después construyen el primer piso”.

Recuerda Miguel Ángel “Lito” que contaba su padre que estaba allí cuando a los 34 años tiene que dejar el cigarrillo por un problema de salud que lo asusta. Paradójicamente Lito también deja el cigarrillo a la misma edad también por problemas de salud.


Don Temer hacía grabar la publicidad en reglas de madera de 30 cm. y en las mismas se colocaba esta publicidad:

TEMER JACOBO

TIENDA - ALMACÉN DE RAMOS GENERALES

Siempre Novedades - Compra y venta de frutos del país. NAFTA Y ACEITE Y.P.F. - QUINES (SAN LUIS)

Temer contrajo matrimonio con Lucía Flores.
En 1938 compra un terreno frente a Miranda donde esta actualmente el casino, pero abarcaba lo que es la bodega, el correo y la casa de Godoy e instala allí el “Gran Hotel y Buffet Moderno”.


Un hotel de lujo como dicen los pobladores mas ancianos de nuestra localidad. No había en Quines algo así anteriormente y muchos de los eventos sociales transcurrieron allí. Aquí nació Rosa María “Ñata” en el año 1938. Esa propiedad la vende mas tarde a Manuel Reyes “rubio” Romero.

 
Esta vista corresponde al patio trasero del Hotel.

Cuando “Ñata” tiene 2 años de edad compran la casa en la esquina de 9 de Julio y San Martín a Pereyra Guiñazú (cree Ñata). La casa estaba alquilada para que funcione la escuela nº 50 (tenía 7 aulas; la primera habitación a la derecha era la dirección y en el cuarto del fondo se inicia Eduardo “Lalo” Rodríguez con 20 años de edad. El cuarto tenía techo de chapas de zinc y comentaba que sufría mucho calor. Lo mandaron allí ya que era el único maestro varón). Es así que la escuela se traslada a la esquina de Sarmiento y Moreno (donde fue el Ateneo). La casa tiene 100 años y no tiene ninguna fisura a pesar de haber soportado los dos terremotos.
Marcos Arse contaba que fue a esa escuela hasta tercer grado por que no había más que hasta 3ro. y el algarrobo que esta donde tiene el taller Lito ya era grande.

Recuerdos de don Temer: Esta es la tapa y la segunda página de la Libreta de Inscripción en la Junta Electoral de la Provincia de San Luis para extranjeros que le permitía emitir el sufragio en nuestro país.










LA FÁBRICA DE PASTAS

DE DON CONSTANTINO MANZUR.

Seguramente entre 1915 y 1925, la familia Manzur tuvo que tomar una decisión drástica.
Al igual que a Moisés, dejar a sus hijos abandonados en el agua para ver si se salvaban, para ver si alguien los rescataba, para ver… hasta resulta contradictorio, pero ellos también debieron asimilar la posibilidad de que los enviarían para no verlos más.
Es así que el jefe de la familia toma a los dos varones, los esconde en un barco, y los envía a un destino desconocido donde no hay guerra.
¿Decisión de supervivencia? ¿De un futuro mejor para sus hijos?
Quién lo sabe, tal vez ni siquiera ellos lo sabían. Pero como cada padre quiere lo mejor para sus hijos, seguramente permanecer en el Líbano “no era lo mejor”.
Estos muchachos, sin saber bien lo que pasaba y sin saber lo que les deparaba el destino, escuchan por última vez a sus padres y allí se quedan, escondidos, perturbados y totalmente desorientados. Apenas con un envoltorio en el que llevaban alguna mudita vieron pasar las horas y con ellas la ansiedad y el hambre comenzaban a estrujar sus estómagos.
¿Quién los amparó?; ¿Qué comieron?; ¿Dónde durmieron?; ¿Qué pasó en el barco?
Solo ellos lo supieron y prácticamente nunca lo contaron. Dejaron todo su pasado atrás y perdieron en el barco la poca documentación que pudieren haber llevado.
¿La perdieron o la anularon?
Pareciera que fuera la segunda opción la respuesta.
Cuando llegan a nuestras tierras no saben sus nombres y no saben cuando nacieron. O directamente no les entienden absolutamente nada y anotan sus nombres como Constantino y Cecilio.
¡Valla casualidad! A Constantino le anotan como fecha de nacimiento el día de la “Diversidad Cultural”. Nada menos que el 12 de Octubre.
Para él, ese día nació y para sus hijos, ese es el día de su cumpleaños.
Una vez en Argentina, como muchos en aquellos años, salen al oeste a internarse en el mediterráneo ya que en el puerto seguramente les aseguraban que aquí iban a lograr su total libertad e iban a prosperar.
Llegan a San Luis y allí se quedan un tiempo hasta que un nuevo llamado los incentiva a venirse a San Francisco en donde se establecen por un lapso de 10 a 15 años y donde comienza la búsqueda de negocios. “Se hicieron de la nada” comprando y vendiendo, caminando las calles hasta que lograron adquirir un burrito y así fueron progresando y a medida que el progreso aumentaba se fueron independizando uno del otro. Allí, en San Francisco, Constantino conoce a una hija de franceses de quién se enamora y construye su familia. Se trata de María Luisa Bodit.


Constantino y su esposa María Luisa

Tienen cinco hijos: Carlos Washinton “Cacho”; Carmen “Chicha”; Jorge Luis; Jesús y Rosa R.
Carlos nació en San Luis capital y los demás en San Francisco.
Siendo Rosa muy chica y con una pequeña fortuna se establecen en Quines. Construyen su casa en 9 de Julio (donde está actualmente la ferretería del “turco” Naser) y compra todos los elementos necesarios para poner en funcionamiento una Fábrica de fideos cuya marca sería "La Rosita"
Funcionaba con una caldera y los fideos para tallarín se enroscaban a mano (se hacía el vaivén).
Se acomodaban en canastos o en bolsas. Los canastos tenían un metro de alto y un metro de diámetro aproximadamente. Les ponían un papel, se acomodaban prolijamente los fideos y se tapaban con una tapa también de mimbre.
La variedad de fideos era muy amplia; Había para tallarín, soperos y guiseros. Los moldes – recuerda Rosa- eran de bronce.
Cuando la mercadería esta lista y acomodada se cargaba en el vehículo y personalmente salía Constantino a venderla por toda la costa sanluiseña y cordobesa abasteciendo los negocios.
La fábrica de fideos fue un emprendimiento muy productivo e innovador para la zona. Tanto es así que cuando se trasladan a Villa Dolores para quedarse definitivamente allá, continúa con esta actividad.
Comentan los que lo conocieron que los negocios los hacía en su idioma y tenía una facilidad innata para realizar los cálculos matemáticos.
En nuestro pueblo les daba trabajo a varias personas.

¿Qué fue de los hermanos?
Cuando los hermanos Constantino y Cecilio están en San Francisco y ya tienen alguna platita, buscan en el Líbano a su hermana Narcisa y la traen a nuestro país.
Cecilio se queda en Luján y allí termina sus días.

Constantino muere un 2 de febrero en un accidente automovilístico.

Anécdota:
La casa que construye Constantino era como hoy la vemos: de dos pisos.
El más terrible de los hijos era Jorge y cuando Constantino lo retaba y no le daba permiso para salir, se tiraba de la ventana de arriba a la acequia que pasaba frente a la casa y se iba a jugar.

Con el transcurso de los años la casa no cambió mucho su aspecto. Funcionó un tiempo aquí la Escuela del Hogar cuando se traslada desde la Plaza Del Niño o Plaza Vieja.



ALDO JOSÉ "PEPE" MAGNANO

Y LA FÁBRICA DE MOSAICOS


(21/04/1929 – 27/08/2009)


Hijo de dos familias muy laboriosas y emprendedoras que llegaron a nuestro pueblo para transformarlo. Me refiero a las familias Magnano y Bertoi.
“Pepe” es hijo de José Magnano y Lucía Bertoi; matrimonio que vivió al este de la calle angosta desde su actual casa hasta el hospital (un canal delimitaba el terreno) y hasta “Toto” Turri.
Recuerda doña Olga que al sur tenía una huerta con frutales.
Las familias Magnano y Ávila fueron muy unidas desde el momento que don Sinecio se establece en donde hoy es la casa de Hidardo.
Doña Lucía y María Rosales (esposa de don Sinecio) fueron muy amigas desde el primer momento en que se conocen.
Aldo José realiza parte de sus estudios primarios aquí (fue alumno de Eduardo “Lalo” Rodríguez) y los últimos años en la ciudad de San Luis. Sufrió mucho esos años ya que discriminaban a los que iban a estudiar del interior y los docentes tenían predilección por las familias bien posicionadas de la ciudad. Recordaba que su madre en una ocasión le envía un par de zapatos y como no era común este tipo de calzados en las familias de clase media ya que iban con alpargatas si es que tenían; uno de los compañeros le dice “mira el chuncano con zapatos” y fue allí donde “Pepe” cansado de que le digan Chuncano o norteño despectivamente le acertó una piña dejándolo estirado. “Desde allí no me dijeron mas nada sabía decir”. Cansado de problemas y tras sufrir mucho se viene y no regresa más a San Luis.
Hace los estudios secundarios en Villa Dolores y fue allí donde adquiere gran habilidad en muchos deportes logrando ser campeón de jabalina.



Cursa hasta tercer año la carrera de Abogacía en Córdoba y fue compañero de Menem “el Riojano” y Angeloz “el Petizo”. Eran años en donde la política era una palabra fuerte y dominaba todos los ámbitos. Los oradores más fuertes fueron los mencionados y se paraban en los bancos para exponer sus ideas. O se era peronista o se era radical. No había términos intermedios y justamente “Pepe” esta allí, al medio.
Estaba en la presidencia Perón y al que no era peronista o no se manifestaba como tal le hacían la vida imposible como cobrarles las fotocopias tres veces mas caro, darles menos comida en el comedor y perseguirlos constantemente.
Recuerda que en un momento, camino a la universidad ve cortada la calle y de un auto vidrios negros (como se decía entonces a los autos con vidrios polarizados) y alargado baja una señora rubia que al principio pensaron que era Eva y después supieron que fue la hermana “Blanca”, entró a la universidad y en cuestión de minutos salió con el título de abogada bajo el brazo. Se armó un revuelo impresionante a raíz de esto.
Un poco por las presiones políticas y otro por que no le gustaba, abandonó la universidad antes del derrocamiento de Perón (16 de septiembre de 1955) y se va a Buenos Aires a seguir la carrera militar con aproximadamente 22 años.
Para ser aceptado en la escuela militar necesitaba una tutora y consigue que sea nada menos que la señora Carolina Tobar García.
Con todo listo se hace los estudios y el médico determina que no es apto para ingresar en la Escuela Militar ya que tiene el corazón grande y le daba pocos años de vida.
Al ver frustrados sus estudios y encima con pocos años de vida según el parte médico, se abandona un poco y fuma en exceso.
De regreso a Quines se anoticia que el banco necesita empleados para lo cual deben rendir un examen de ingreso para lo cual el requisito indispensable era ser dactilógrafo y tener conocimientos de contaduría.
¿Quién lo prepara?
El amigo de la familia que fue su vecino por muchos años y el que sería su suegro: Don Sinecio Ávila.

Rinde el examen y obtiene el puntaje más alto y lo nombran en la casa matriz de Villa Mercedes. Estuvo un tiempo allá y como los medios de transporte de la época no tenían frecuencias permanentes y había muchas dificultades para venir, pide el traslado a este banco. Trabaja unos dos o tres años aquí.
En el año `58 aproximadamente fue Jefe Departamental de la Policía con sede en San Francisco del Monte de Oro.

Don Sinecio lo quería mucho a “Pepe” y le dio el último turno para que vaya a la Academia. Doña Olga recuerda que a nadie le permitía que fumase dentro de la academia y a Pepe si.
En una de las charlas que tienen don Sinecio le dice: - Jovencito Magnano: Ud. ya tiene edad para formalizar una pareja. Tiene que empezar a pensar en eso.
- Si don Sinecio –le responde Pepe- y apenas tenga una esposa la voy a cantar a palos así sepa con quién se ha casado.


El destino quiso que un 20 de diciembre de 1970 se casara con su hija a la que tal vez nunca miró con interés cuando eran vecinos ya que 17 años de edad eran los que los distanciaban a uno del otro. El casamiento fue en San Pedro y sus dos hijas nacen en Villa Dolores por que rechazaba completamente a la ciudad de San Luis y si, tenía gran afecto por Villa Dolores.
Olga Ávila fue su compañera inseparable por casi 40 años con la que compartió todo, el levantarse a la misma hora para desayunar, el trabajar en lo mismo los dos (la ferretería); el salir juntos o estar juntos en la casa, el día y la noche, la tristezas y las alegrías, la salud y la enfermedad… Todo.
Un día doña Olga mirando un roperito que acompañó a Pepe por todas partes (“Sabía mas el ropero que él” –dice doña Olga-), encuentra una jabonerita rosada y Pepe le pide que la abra. Se encuentra dentro de la jabonera con un mechón de cabellos plateados y rizados y Pepe le pregunta:
- ¿Sabés de quienes son?
- Seguro de tu mamá -responde Olga sin dudar-.
- Si, -le responde y agrega- yo le pedí a tu mamá que le corte un mechón de pelos cuando falleció la mamá y lo guardé allí.

En el año 1971 trae Electrodomésticos para la venta, pero como don Salcedo era muy reconocido en ese rubro comienza a traer caños de cerámico para cloacas y de a poco instalan la Ferretería Magnano.
Estando en la intendencia José Edgardo “Toto” Alume; Pepe donó los terrenos para que se abra la calle y de paso esto le permitía eximirse de pagar impuestos.
Como la Usina ya funcionaba en el lugar que actualmente está, es él quien le pide a “Toto” que se llame Edison en honor al inventor de la bombilla de luz (tradicional foco)
- Si, como no –dice “Toto” bromeando- el nombre que a vos se te ocurra le vamos a poner. ¿Quién te va a decir que no?
Se puede decir que don Pepe Magnano era el espejo de las personas con quién trataba. Era bueno con los que él consideraba buenos y era malo con los que consideraba malos. No tenía ningún problema en invitar a golpes a algún vecino y muy fácilmente se le escapaban las hojas del diccionario y le salía una mala palabra. Era un hombre fuerte y casi nunca se lo vio llorar.
La primera vez que lo vi llorar fue cuando nuestra hija Miriam estuvo a punto de morir por una infección en el oído no detectada a tiempo –recuerda doña Olga-.
Tenía verdulero a domicilio ¡Cuántas veces se lo vio a “Tonono” llevarle las verduras a su casa!
Cuantas anécdotas tiene el pueblo para contar de “Pepe”. Algunos pequeños clientes iban a comprar tornillos y llevaban como muestra un palito y los mandaba de vuelta para que sus padres le den la medida que necesitaban.
Recuerdo que tenía una bolsa de boxeo para practicar algunos golpes y nos hacía golpearla. ¡¡Era sumamente pesada!! Después él le pegaba una piña y la hacía balancearse.
Mirando a los ojos a sus clientes, prestaba mucha atención a lo que decían y lo invitaba al sector donde estaba esa mercadería.
Muy pausado para hablar decía: ¡Pase Ud. adelante por favor! Al momento que indicaba con su mano por donde debíamos ir.

Nunca olvidaré cuando me decía:
- Joven Garciita ¿Qué anda necesitando?
Y al despedirse siempre me decía.
- Me le manda muchos saludos a Rubencito ¿Sabe?






LA FAMILIA MAGNANO
La historia de la familia Magnano comienza posiblemente en la Baja Toscania (Italia) donde José Magnano (Hijo de José Magnano y María Madgalena Odetti) se casa con Margarita Bosio. Tienen una hija en Italia a la que bautizaron con el nombre de su abuela paterna y es en estos años cuando tienen que emigrar a Argentina. Una vez en nuestras tierras se vienen hacia Córdoba y se instalan un tiempo en Las Rosas en donde nacen otros de sus hijos.
Cuando llegan a Quines y comienzan a forjar sus proyectos, fallece José Magnano (el 3/05/1911) con tan solo 47 años de edad.
La italiana Margarita Bosio de Magnano (nacida el 12/04/1873), señora de carácter, es quien tiene que tomar las riendas de la situación y con ayuda de un primo suyo y la de sus hijos construye el Hotel.
Era ella quién distribuía las tareas y a cada uno le asignaba una. Es así que cuando comienzan con las mini industrias cada hijo/a era encargado de una. Por ejemplo las hijas eran las encargadas de las tareas del Hotel (lustrar los pisos de parquet; limpieza de las habitaciones, cocinar, atender los clientes y elaboración de conservas)
Recuerda Aide (hija de Dominga) que no había duraznos al natural como los que allí se hacían. Lo envasaban en botes de aceite que limpiaban al extremo y lacraban las tapas y les colocaban azufre para su conservación.
Todas las conservas se llevaban al sótano en donde se mantenían en muy buen estado.
Bartolo y Simón eran los encargados de la panadería y la fábrica de soda. José de la herrería.
También tenían la fábrica de gaseosas “Bolita”.
El Hotel fue escenario de fiestas, veladas, cumpleaños y reuniones importantes. Tenía dos espejos grandísimos en dos de las paredes del salón principal.
Para las reuniones de autoridades importantes tenían cubiertos de plata.
Tenían una flota de 12 carros con los que buscaban mercadería en otras ciudades. Cuando venían llegando, el que manejaba el primer carro tocaba una corneta que se escuchaba desde muy lejos para que se vallan preparando para descargar los mismos y liberar los animales.



La foto fue tomada seguramente en el patio del Hotel para el festejo de los 80 años de Margarita Bosio de Magnano.

Margarita es la anciana que está sentada en el centro. Detrás de ella, con un moñito negro en el pecho, su hija Teresa (casada con Alberto Saitúa). A la derecha Bartolo Magnano y su esposa Ángela. Más a la derecha con camisa blanca y corbata negra don José Magnano y su esposa Lucía Bertoi. A la izquierda de doña Margarita con entradas en la frente Simón Magnano y su esposa Marta Resio que tiene un bebé en brazos y delante de ella Margarita Magnano casada con José María Ramírez que está a su lado.
Fallecida doña Margarita, alquilan el Hotel a don Carlos Floriani y después a don Quevedo. Posteriormente Bartolo lo vendió a Isidoro Ochoa (actual dueño).



La Fábrica de Mosaicos:

Justamente donde actualmente es la casa de Roberto Ramos pasaba la calle angosta. Al oeste tenía unos galpones don Bartolo Magnano y es él quién instala la fábrica de mosaicos.
Antes de casarse “Pepe” le compra la maquinaria y la instala en los galpones detrás de su casa. Era todo manual y la fabricación demandaba mucha pérdida de tiempo por lo que decide comprar en Buenos Aires la maquinaria nueva, esta vez eléctrica e hidráulica. Venía todo completo y como accesorios una pulidora de granito y la cortadora de mosaicos.


La empresa que se la vende envía personal para la instalación de la misma y es un primo de doña Olga: Roberto Ávila quién se ocupa de toda la instalación eléctrica ya que era muy minucioso en lo que hacía.
Instalan y prueban todo y es Pepe el encargado de hacer funcionar la cortadora que tenía una instalación de agua para que sobre el mismo corte emane el líquido ¡Quedó hecho agua!
Los mosaicos que actualmente están en la Plaza Crisóstomo Lafinur fueron hechos aquí y la casa de la Sra. Gloria Rosas edificada en la intersección de Edison y Sarmiento fue una de las primeras a las que se le colocó piso de granito y lo pulieron para eliminar los poros que pudieran quedar.


Fueron empleados en la fábrica muchos años el "Loco" Ávila y Jorge Fiochetti.

Los últimos años Jorge era el que manejaba la máquina.
Además de mosaicos se hacían mesadas de granito y piletas de lavar.
¡¡Todo Made in Quines!! ¿Qué les parece?

Su Mamá:


Doña Lucía Bertoi (Nacida en 1891 o 1892)
Fue directora en la escuela de varones Nº 49 que funcionó en donde es actualmente el Club Atlético Unión Quinense y luego en la calle Moreno y Sarmiento junto con la escuela Nº 50.
En el turno mañana iban los varones y en el turno tarde las mujeres. Años más tarde fue mixta y con una sola denominación.
Se enferma, teniendo Pepe 25 años, un 31 de diciembre de 1954 y muere al otro día.
Doña Lucía Bertoi fue hija de Domingo Bertoi y de la cordobesa Luisa Rosas (Nacida en 1857 o 1858). Aquel inmigrante que viniendo a Quines instala y pone en funcionamiento un Molino Harinero en donde hoy es la casa de Tobas Pereira.
Fueron hermanos de Doña Lucía: Eulogio (7 años mayor); Beatriz (2 años mayor); Pedro ( dos años menor) no pudiendo precisar si tuvo más.



DOMINGO BERTOI

EL MOLINO HARINERO DE QUINES

(Gracias al trabajo de Iara Sofía Tarazi y de la Sra. María Isabel Quiroga de Robledo)

El Sr. Domingo Bertoi (nacido en 1846 o 1847) llegó a Quines de Italia su país natal en 1888 aproximadamente; y se encontró con que en toda esta zona había mucho cultivo de trigo. Esto lo llevó a tener la idea de crear y poner en funcionamiento el primer molino harinero de toda la zona.
Era una empresa de gran embergadura para aquella época, no nos olvidemos que hablamos de fines de la década de 1880.
Para poder llevarla a cabo necesitaba gente que supiera trabajar en el oficio, algo que aquí no había; por esa razón pensando en sus amigos de su pueblo natal recordó al Sr David Turri (Nacido en 1864 o 1865) de oficio "molinero" y "pedrero" (trabajó la piedra de diversas formas) que en sus charlas también había manifestado sus deseos de viajar, por este motivo lo llamó inmediatamente.
El mismo viajó rápidamente en barco hasta Buenos Aires donde lo esperaba el Sr. Ricardo Benítez (carrero) y desde allí partieron hacia Quines en diligencia a encontrarse con su amigo.
Una vez en el pueblo su amigo Domingo le manifestó con todos los detalles la idea del molino y así comenzaron las tareas de su instalación de forma inmediata.
Para la realización de este molino se trajeron piedras desde Rosario de Santa Fé, hasta Villa Mercedes y desde allí hasta Quines. Fueron cargadas en carros tirados por mulas. Con estas grandes piedras pulidas y acondicionadas por el Sr. David Turri más los engranajes y rodillos se armó el molino hidráulico. Su altura era de entre 8 y 9 metros.

Se extraía:
- Harina Flor: con la cual se preparaba un pan muy fino tipo "francés".
- Harinilla: (con un poco de fibra del cereal), con la que se amasaba el pan tipo casero.
- Horinillón: (con más fibra que la anterior), se usaba para la torta al rescoldo.
- Una parte de esa harina se guardaba para el engorde de los terneros guachos y como alimento para cerdos. Era igual al afrechillo de ahora.
Parte de esta harina se comercializaba en San Juan y La Rioja; en San Juan se la cambiaba por aguardiente y en La Rioja por sal. La otra parte se comercializaba en efectivo o en forma de trueque con San Martín, Talita, y otros parajes del lugar de donde traían frutas secas, arropes, nueces, quesos, etc. y llevaban harina y trigo molido para la mazamorra.
Para el trueque se usaba harina de segunda calidad.
Bertoi demostró ser un buen comerciante; proveía de sal, obtenida del trueque, a los panaderos de aquel entonces y el aguardiente a los distintos boliches.

Del Molino solo queda el recuerdo en la memoria de algún abuelo y algunos vestigios. Algunas de esas piedras se encuentran en la casa que en vida fuera del Sr. José Cristóbal “Tobas” Pereira; puesto que el molino fue instalado al frente  de la casa de su actual propiedad por donde pasaba el camino hacia el Muro el cual era costeado por el canal y justamente allí hacía una curva y había una caída de agua, esta la necesitaban como energía para su funcionamiento.
“De lejos se veían los pocos hombres (menos de 10) que trabajan en él. Del trabajo del molino vivían 300 a 350 personas, si uno tiene en cuenta quienes proporcionaban las materias primas, además de los cosechadores y los que transportaban el trigo hasta el molino” –dice don” Tobas” Pereira-
La gente sembraba y algunos tenían en sus propiedades pequeñas “eras” (lugar descubierto donde se trillaban las mieses), de lo contrario, trasladaban las espigas de trigo después de cosecharlo a una gran “era”, ubicada en la parte actual del Datilero, Hostería y aserradero de "Pocholo" Amaya.
Se hacía similar a un corral con palos verticales y horizontales, en el centro se realizaban las parvas con las espigas, se largaban los animales yeguarizos y se llevaba a cabo la trilla y poco a poco se desparramaba la parva hasta el final.
Para esta tarea había una persona que se dedicaba a realizarla puesto que tenía los animales necesarios, venía de Candelaria cada vez que se lo requería, era el Sr. Andrés Rosas (padre de la Sra. Gloria Rosas de Farías y Hnos.) Una vez realizada esta tarea recién pasaba al molino.
Allí se pagaba para la molienda con dinero o se acostumbraba el trueque.
Este molino funcionó por varios años y dejó de hacerlo entre los años 1920 y 1922.
Las zonas más productoras de trigo que proveían al Molino era el actual Barrio Belgrano y la actual Banda Este.

Estas tres grandes piedras están en la casa de Pereira y correspondieron al molino de don Domingo Bertoi. Gentilmente Ricardo y José Pereira permitieron que las fotografíe.

PIEDRA SOLERA

 PIEDRA DE CONTRAPESO para levantar la piedra corredera cuando fuese necesario.

PIEDRA CORREDERA

Aquí un gráfico para entender como funcionaba el molino. La fuerza del agua originada por una caída produce el movimiento circular al girar el rodezno y por medio de un eje o árbol que pasa por la piedra solera hace girar la piedra superior o corredera que es la encargada de la molienda.
Las figuras talladas en la piedra tienen por objeto lograr que los granos se traben para molerlos más rápido y el harina circule hacia afuera.


En esta imágen se ve la SALA DEL MOLINO con la tolva en donde se introducía el trigo que caía justo al centro de la piedra corredera y con madera se construía una gran batea donde quedaba depositada el harina. Al fondo se puede apreciar un rodezno.

 Esta piedra solera que se ve abajo también corresponde a un molino de Quines. Está en la casa de doña Leopolda Olmedo y su compañera está actualmente en el ex Ateneo Municipal ya que fuera prestada por el Sr. "Rolo" Arrieta para la exposición fotográfica que realizara el matrimonio Gatica-Moreno.
El encargado de hacer funcionar este molino era don Cesar Rinaldi (padrastro de doña Leopolda y abuelo del Sr. Julio Rinaldi) y estaban en las propiedades de don Justiniano Amaya.
Según recordaba doña Leopolda, se usó mucho para la molienda de maíz y también para hacer polenta.

Las dos imágenes siguientes corresponden a la piedra corredera que está en el ex-Ateneo Municipal vista desde abajo y desde arriba.


Trabajaron en el Molino Harinero doña Francisca “Panchita” Rosales quién contaba con lágrimas en los ojos que allí conoció a su esposo Don Tomás Díaz porque él trabajaba en el mismo lugar.
El Sr. Domingo Bertoi se casó con la sobrina nieta del Gral. Don Juan Manuel de Rosas, la Sra. Luisa Rosas de Bertoi, de esta pareja nació una niñita que se llamó Lucía ( madre de "Pepe" Magnano) de la cual se habló arriba.

El Sr David Turri al ser pedrero o picapedrero como llamaban a ese oficio, también se ocupaba cada vez que venía creciente en hacer la pirca del cruce del Muro.
Se casó con Cesárea Pizarra de San Francisco y formó su familia aquí. Tuvieron varios hijos de los cuales viven algunos en la actualidad. Uno de ellos es el Sr. Teófilo “Tito” Turri nacido el 3 de noviembre de 1913 en la Banda Este de Quines y como su padre también trabajó la piedra siendo obrero cuando se construyó el dique nivelador “El Muro”.
David Turri vino en 1890 y falleció en 1944.









ANDRÉS ROSAS

SU RELACIÓN CON EL MOLINO HARINERO Y UN POCO DE LA HISTORIA DE SAN MIGUEL


Andrés Rosas (nacido el 10/11/1895 y falleció a los 104 años).

Era primo hermano de Lucía Rosas de Bertoi.
Ambos tienen un parentesco con Juan Manuel de Rosas que rastreó “Pepe” Magnano en su momento. No saben si son parientes directamente de Juan Manuel o por parte de un indiecito que este crió y reconoció.
Se iba por el Injerto, San Martín, Renca y cruzaba a la Punilla. Se ocupaba de llevar animales para la trilla en las localidades de Guanaco Pampa, Río Cuarto, San Pacho, La Punilla y Venado Tuerto.
Llevaba 3 o 4 hombres para que lo ayuden con el arreo de los animales (mas o menos eran 12) y con esos mismos hombres trabajaba.
Hacía muy buen sueldo en la temporada y como los caballos terminaban agobiados los vendía y los reponía con creces.
Sabía contar que una vez traía mucha plata y unos ladrones que ya tenían fichados a este tipo de trabajadores lo persiguieron para robarle el dinero. Don Andrés observa que lo venían siguiendo y no detienen la marcha hasta que los tomó la noche en pleno campo. Ató los animales en unos arbustos en el suelo y la otra rienda la envolvió en su mano para estar alerta. Como dormían con la cabeza apoyada en el suelo siente que vienen al galope y les dijo a sus acompañantes que continúen la marcha de noche. Los animales que traía no eran mansos pero comenta que esa noche advirtiendo un mal presagio se prestaron para llegar a una casa. Los atiende el dueño y don Andrés le explica lo que sucede a lo que el dueño de la casa le responde:
- No sabe que me pone en un compromiso por que hace unos 20 días le pasó algo semejante a un hombre que volvía de trabajar y estos bandidos entraron a la casa, lo apuñalearon dándole muerte y le robaron la plata. Nosotros tuvimos que salir con mi familia lejos de la casa.
Así y todo les permitió que se quedaran un rato ya que estaba por amanecer y seguramente durante el día no se atreverían a robarles.
De día era distinto por que Andrés tenía un revolver y ya podían defenderse de otra manera.

En estos viajes por Córdoba y Santa Fé, Andrés aprendió a cultivar y cosechar trigo y cuando Domingo Bertoi instala el Molino Harinero en Quines ya no viaja más para allá y se queda aquí para asesorar a los cultivadores de trigo y realizar la trilla.
Él tenía su campo en San Miguel y llevaba su trigo para tener harina con la que subsistirían durante el año.
En el molino calculaban lo que cada familia iba a consumir y vendían el excedente. Antes de eso se hacía harina en conanas de piedra.

Sembraba maní y al igual que don Carlos Floriani sembraba y secaba tabaco (Don Carlos sembraba en donde actualmente es el barrio 100 viviendas y el secadero lo tenía en el hotel Magnano).
Don Andres sabía decir: “No muy lejos se van a unir estas tierras comprendidas entre Candelaria y Quines con el cultivo por que son muy aptas para cualquier tipo de cultivo”

Mamá sembró 10 naranjos –dice Gloria- en la entrada de la casa de semilla y los regaba con ayuda su unas vecinas que iban al viejo canal que llegaba a Candelaria. Los vió crecer y dar frutos. Estuvieron en pie hasta el año pasado (2010).

Su casa era el centro de las Tertulias de la zona. Se hacían novenas de enero a diciembre.
Las novenas eran dedicadas a:
Enero: Niño Jesús
Febrero: Virgen de la Candelaria
Marzo: San José
Abril: Jesús de la buena muerte.
Mayo: Virgen de Fátima
Junio: San Antonio
Julio: Virgen del Carmen
Agosto: San Roque
Septiembre: Virgen de la Merced
Octubre: Virgen del Rosario
Noviembre: Novena de las ánimas
Diciembre: Inmaculada Concepción.

En las tertulias se rezaba el Santo Rosario dirigiéndolo mamá y papá –Explica Gloria-. Mamá rezaba y hacía el coro (respondía) papá. Se hincaban en los chuses y todos los hijos estábamos de rodillas junto con la gente. Mamá tenía hechos varios chuses en telar indio y estaban colgados en los zarzos. La gente llegaba, sacaba uno, lo sacudía y rezaba.
En verano se rezaba al aire libre y en invierno debajo de un galpón.
Cada santo tenía su himno. Se cantaba y al terminar el rosario se ponía música en la vitrola (Polcas, jotas con relación, y todo tipo de folclore) pero durante la novena no se bailaba.
Cuando terminaba la última noche se hacía la procesión. Ese día los hacheros y carboneros que trabajaban para papá tenían feriado.
A la mañana había carreras de caballos se comía y a la tarde la procesión. Todos los niños iban juntos con unas bolsitas de tela que había hecho mamá y dentro de ellas llevaban pétalos de rosas. Durante el trayecto de la procesión que era de unas 10 cuadras los chicos iban arrojando pétalos.
A la noche se les daba la cena (gallinas, cabritos, lechón) gratuitamente para lo que la gente venía y colaboraba en prepararlos y se servía vino y gaseosa “la Bolita”. Al terminar la cena se bailaba.
El día de la fiesta no tenían que haber ningún borracho. Si había uno lo sacaba y le decía que tenían todos los días que quisieran para tomar pero ese día no por que era una falta de respeto al Santo.

Don Andrés donó 2 hectáreas de su campo en donde se construyó un barrio con 7 casitas, la sala de Primeros Auxilios, un Puesto Policial (aún sin estrenar), pero la prioridad era la construcción de una Capilla.
La señora Gloria trabajando aún en la escuela primaria de San Miguel terminó de construir la capilla que es un orgullo para ella en honor a sus padres. Los patronos son San Miguel y la Virgen del Valle.
Además escribió la letra del Himno a San Miguel utilizando la música de un himno a la Virgen que sabía cantar su mamá cuando hacían las procesiones. Dice así:

Glorioso Miguel Arcangel
mensajero del salvador
aleja al ángel maligno
y se nuestro intercesor.

Los Arcángeles del cielo
tienen la orden divina
de llevar hasta su predio
las almas que quiere Dios.

Gloria vivió en San Miguel hasta los 11 años que fue cuando don Andrés vendió el campo y compró una casa en Guaymallén – Mendoza y los potreros que tiene Oscar Llanos. En Quines construyó la casa que queda para Gregorio y luego otra en donde vive actualemente Gloria y su marido José Farías.

Hasta los 97 años iba a trabajar con el hacha y la pala haciendo acequias. Le costó muchísimo adaptarse al pueblo. Se pasaba horas sentado en el sillón hamaca en el jardín del fondo pensando seguramente en el campo y las tareas rurales.

Su esposa se llamó Dalinda de la Merced Domínguez (nacida el 24/09/1902) y sus hijos:
Belinda Lilia; Gregorio “Goyilo”; Aida Sila; Rubén Merido; Amado y Gloria Lidia
Además muchos varones criados: Algunos son “Beto” Suárez (suegro de Héctor Torino); Pedro Payare y otro chico llamado Ramón.

Como otra de las historias familiares Gloria recuerda que su papá le contó que una de sus tías llamada Carmen Rosas fue robada por los indios en la localidad de Sampacho de donde es oriunda su familia.

ARTÍCULOS DE MUSEO
Dentro de los recuerdos familiares están la radio marca Ambasador; La escopeta del 16 con la que según las cuentas de Andrés, mató casi 27 pumas y una frazada tejida en telar huarpe de una fineza admirable y terminaciones perfectas hecha por la señora Dalinda. Sinceramente parece un poncho y es difícil creer que algo así se pueda hacer artesanalmente. Se la regaló a su hija Belinda y en su poder se la quiso comprar la poetiza y escritora lujanera María Delia Gatica ofreciéndole 600 pesos en ese entonces. Con el paso del tiempo Belinda se la obsequia a la Sra. Gloria y la guarda celosamente como a un tesoro.




También un cenicero realizado por el Sr. Edisto Bressa en madera de retamo para las bodas de oro del matrimonio Rosas - Domíguez (24 de julio 1918 - 1968)







MELCHOR BORIA


Melchor vino de Mendoza como chofer de una compañía inglesa cuyas siglas eran C.I.T.A. (Compañía Internacional Transportes Automóviles S.A.)
Con él vino Aldo Dasso y dos choferes más.
Esta compañía inauguró el trayecto Quines –San Luis por el antiguo camino bien al pie de la sierra.
Recuerda Rosa Boria que usaban un uniforme que era un sobretodo marrón y gorra con visera y un distintivo color cobre.
Los ómnibus eran marca Tornicroll. De dos misos y mixtos (mitad carga, mitad pasajeros)
Venían de San Luis y paraba en el Hotel Magnano. Para salir al otro día buscaba los pasajeros a domicilio y salía con destino a San Luis.
Los pasajeros tenían dos tipos de pasajes que distinguía a las familias pudientes de las humildes. Los pasajes eran “con pupo” o “sin pupo”. ¿Cuál era la diferencia?
Los que sacaban “Con pupo” pagaban menos pero a cambio debían bajar a empujar el ómnibus cuando se quedaba en los ríos que tenía que atravesar o sea que pagaban menos a costa de mojarse los pies y hasta los pantalones.
“Mi viejo se bajaba a revisar la pasada del río, por donde estaba mejor, la altura que tenía el agua y si no había piedras peligrosas o en su defecto calzar las pasadas feas con otras piedras” –cuenta Guillermo Boria-.
Había pasos muy conocidos por los viajantes de la ruta.
-En Suyuque Viejo estaba “El paso de la muerte”: Tenía una forma de herradura con una “V” en la parte mas baja. El que quedaba sin frenos se accidentaba y al llegar abajo tenía que subir en primera con el riesgo de quedarse en plena subida. Cuando se detenía el vehículo en la subida el chofer debía tirar el vehículo contra la orilla de piedra para evitar un accidente fatal.
-Cerca de Carpintería estaba “La pata de buey”: Una gran piedra que tenía grabada la forma de la pata de este animal en tamaño grande.
- El Km. 100 donde apartaba el alto del bajo. Como referencia había una piedra allí.

Sin puentes, por caminos malísimos con arenales y piedras con numerosos cursos de agua por sortear; cada viaje era una hazaña y llegar a destino el orgullo de los choferes.

Después de esto Aldo Dasso pone su propio transporte y lo continúan sus hijos. Había también una especie de remis que colocó Rosendo Hernández. Viajaban en un Fort A y el chofer era “Ñato” Díaz.

Melchor se queda en San Luis y trabajó en el Hospital en las calderas y posteriormente vuelve e instala un taller en Rivadavia – Mendoza.
Venía siempre a Quines a cazar vizcachas e hizo varios amigos en esta localidad como Sinforoso Suárez, Miguel Ángel y otros.
En 1949 cuando Guillermo tenía 4 años y Rosa 11, le compra 1.200 hectáreas a doña Laura viuda de Suárez en la costa de la sierra en el Muro y solo cuando le vendió a Flores de Candelaria supo que su adquisición llegaba más al oeste del camino del Zapallar.
Su intención fue hacer una finca pero como no sabía nada vendió y se dedicó a lo suyo.
Vivió como 5 o 6 años en donde está la panadería de Viale; luego instala su taller al lado del hotel Floriani donde vive Hugo y posteriormente compra a don Pilar Pereira la propiedad en donde está actualmente el taller Boria. Pone allí el taller y puso la bomba de Y.P.F. en sociedad con José Magnano Bosio (papá de Aldo José “Pepe” Magnano).
El representante era Flores que tenía una bomba en la esquina noreste de la plaza del centro. Ellos dependían de Flores y el margen de ganancia era muy pequeña (aproximadamente le quedaba un 10% de ganancia a Flores y un 3% a ellos) y solicita ser ellos los que también tengan la concesión. Como no los autorizan devuelven todo y cuando lo sacan lo llevan adonde está ahora (Pringles y 9 de Julio).

Se vendía Gasoil, Kerosene, Agricol y Nafta. Se podían mezclar los dos últimos y los vehículos andaban bien pues el Agricol era mejor que el kerosene pero más simple que la nafta y más barato.
Ya estando en Mendoza, Melchor se dedica al automovilismo. Allí corrió en General Alvear y San Martín. Estando aquí siguió compitiendo en Villa Dolores, Villa Mercedes, San Luis y muchos otros lugares. Su copiloto era su cuñado Andrés Vital.
Su vehículo de carrera era una Vaturé fuerza limitada y tenía la publicidad del taller.
Algunos de los trofeos rezan lo siguiente:
- Casa Fabre – Mecanica Provincial – 1er Premio – 6/11/49
- Tercer premio – Olivares Fraga – AMC – Villa Dolores – 1952
- Cordón del Plata – Segundo premio – 1er Certámen Autódromo General Alvear.

Melchor Boria conoció a su esposa, doña Petrona Vital Torres, en Mendoza y allí nacieron Blanca Rosa; Selva Gloria y Guillermo Melchor. Cuando vienen aquí nacieron Angélica Petrona “Negra”; Juan Carlos y Lucio Baltazar.
Melchor compró la Chevrolet modelo 28 que todavía podemos ver por las calles de nuestro pueblo y que fue inspiración del pintor Oscar Calderón.


En ella iba a San Luis a buscar oxígeno, carburo, repuestos y todo lo necesario para el taller. Salía a las 2 de la mañana y llegaba a las 9. La camionetita reformada en Mendoza prestó servicios como ambulancia, pompa fúnebre. Ahora la vemos empujando vehículos, tirando camiones y siendo ladrada por mil perros en las calles del pueblo.

Cuando derrocan a Perón nadie quería ser intendente y él acepta y fue Intendente interino.
Recuerda Rosa que en su período fue cuando creció el río Quines pasando las aguas por sobre el puente y desboronando los costados del mismo.
“En esos años Sosita vino a Quines y como no conseguía trabajo, papá le dio trabajo en la Municipalidad y anduvo tan bien que lo pasaron a capataz y luego al Registro Civil en donde se jubiló” –recuerda Guillermo-.
Chofer, mecánico, piloto e Intendente son las cosas por las que debemos recordar a Melchor Boria.



Transporte C.I.T.A (UN POCO DE HISTORIA)

Este comunicado fue dejado en el Hotel Martín de San Francisco
Gracias a la gentileza de Kevin Coria.


Corría el mes de marzo de 1930 y la C.I.T.A. (Compañía Internacional Transportes Automóviles S.A.) decidía instalarse en la Avda. San Martín al 811 de la ciudad de Mendoza con una oficina cuyo objetivo era realizar servicios de transporte que fueran paralelos al Ferrocarril "Buenos Aires al Pacífico" (el cual posteriormente se denominara: F.C. General San Martín).
La línea Mendoza-Luján de Cuyo fue la primera línea que C.I.T.A consiguió explotar, posteriormente le siguieron otras líneas como la que iba a Rodeo de la Cruz, o la que unía Mendoza con Maipú. Tiempo después se adquirieron las líneas a Chacras de Coria, San Martín y San Carlos. Finalmente lo que parecía un objetivo difícil de lograr, pudo ser alcanzado: las líneas nacionales. Tal es así que se adquieren las líneas entre Mendoza - San Juan y Mendoza - San Luis.
Llega el año 1948 y C.I.T.A. de manera conjunta con los ferrocarriles son absorbidos por el Estado Nacional. Se produce entonces una redenominación de los servicios existentes de modo que: los servicios provinciales de Mendoza se llamarán ahora "Gobernador Civit", los interprovinciales "General Las Heras", los de San Luis "Coronel Pringles", los de San Rafael "General Espejo" y por otro lado T.A.G.A. (Talleres Argentinos Garages y Anexos).

Nace T.A.C.
A partir de todo lo ocurrido por los sucesos que convulsionaron al país, se crea la Administración General de Automotores Argentinos y en 1958 surge la iniciativa del Gobierno Nacional de desprenderse de todas las empresas dependientes de la misma con un medio que posteriormente los argentinos conoceríamos de sobra: la privatización.
Tal es así que el 14 de septiembre de 1959 (mediante la Resolución S.T. 659/59) se fijan las bases mínimas a las que se sujetaría la operación de venta de la empresa que hasta ese momento se denominaba "Zona Cuyo".
Luego de sucesivas reuniones, decide elegirse una comisión de representantes de la Zona Cuyo para acordar las condiciones en las que serían transferidos los bienes afectados a la explotación de los servicios. Las gestiones de esta comisión culminan obteniendo un pre-contrato (con firma del 24 de mayo de 1960 y bajo decreto número 10.031/60) que fue ratificado por la totalidad de los agentes que a esa fecha prestaban servicios bajo la Administración General de Autorrutas Argentinas.
El 1 de julio de 1960, se realiza la asamblea constitutiva en donde se aprueban los estatutos y se designa un consejo de administración. Días mas tarde (siendo el 29 de agosto su fecha precisa) se firma el contrato de transferencia de los bienes de la Zona Cuyo, incluyendo dos anexos con inventario de los material rodante (el cual venía en muy malas condiciones y sin repuestos suficientes), instalaciones, maquinarias, herramientas, instalaciones, material de almacenes, muebles, útiles y lo que es mejor de todo, un permiso para explotar por 10 años el servicio público de transporte de pasajeros por caminos establecidos en el mencionado permiso.
Con las gestiones ya muy avanzadas, llega el día 1 de septiembre de 1960, día en cual la nueva sociedad comienza a operar a modo de "prueba" durante un año para evaluar su desempeño en la gestión independiente, ya sin respaldo del Gobierno. Es entonces que el 1 de septiembre de 1961 cuando se declara que "ha sido cumplido de manera satisfactoria el objeto del contrato" y por ende procede a otorgarse el permiso definitivo. Ha nacido la COOPERATIVA TRANSPORTE AUTOMOTORES DE CUYO, o lo que es igual, la Coop. T.A.C.
En la década del `90 T.A.C decae con la aparición de empresas nuevas y competencia desleal y resurge asociándose a otras empresas en la llamada “T.A.C. +……”
Atravesando ya nuestra etapa contemporánea, nos encontramos con los famosos convenios que T.A.C. debió realizar con otras empresas a fin de lograr su subsistencia y el ingreso de algún dinero extra.
Se cuentan entre ellos el convenio con VÍA BARILOCHE (explotando líneas como VIA TAC), CATA INTERNACIONAL, EL RÁPIDO DE MAR DEL PLATA, COSTERA METROPOLITANA (explotando líneas como TAC METROPOLITANA), ANDESMAR, y la reciente llegada de FLECHABUS.







TEODORO LLANOS

7/02/04 – 4/01/78

Teodoro padre es descendiente de los Llanos provenientes de La Rioja. Se va a vivir a San Francisco y allí nacen Teodoro (h); Hilario; Rafael; Borjas; María Inés y Margarita.
El Gobierno provincial de ese momento era Demócrata y Llanos partidario y seguidor del partido Radical. A causa de esto persiguen a toda la familia y con el pretexto de la peste bubónica quisieron quemar la casa. En esos momentos Teodoro (p) ya era muy viejito y al poco tiempo muere.
La persecución continúa y los hijos de don Teodoro tienen un enfrentamiento armado con la policía. Los tenían sitiados y vino una delegación del ejército y los sacaron sonando por que ya se daba por bien entendido que no tenía nada que ver Salud de la Nación en esto.
Un día va Hilario caminando acompañado de un policía y le tiran un tiro para “barrerlo” y por un mal cálculo el disparo hace blanco en el policía que iba con él.
La situación ya no daba para más y mi abuela Borjas Quiroga –cuenta Pascual Amilcar “Baby”- se puso de acuerdo con los hijos y dispusieron venirse a vivir a Quines a principios del año 1936.
Mi padre tenía carpintería y tornería en San Francisco con Hítalo Carletti.
Cuando vienen aquí se vienen a vivir a doña Andrea de Montiveros (Sra. del Dr. Montiveros) y después le alquilan a Manuel Franco en donde es el colegio “San José” actualmente. Allí nací yo –aclara “Baby”- y mi hermana menor en San Luis. Todos los demás en San Francisco.
Teodoro Llanos (h) vino casado con Juana Romero (de San Luis) y sus hijos son:
Servando Rafael; Mónica Margarita (Sra. de Atalibar Gatica); Sira Lidia; Sara; María Alicia (Sra. de Godofredo Lima); Clelia Ramona; Pascual Amilcar “Baby”; Nilda Alsira y Marta.

Teodoro instaló su carpintería frente al hospedaje de Gumersindo Barrios (padre de Chichín) y la herrería frente a la peluquería de Isaac Ochoa. En la esquina había una casita en donde vivía un mendocino.
Pasan los años y un día apareció don Héctor Estrada diciendo que eso era de él. Teodoro le explica que ellos le alquilan a Manuel Franco (padre de “La Niña” Franco) y tiene que arreglar con él.
Después en 1948 o 1949 aparece un hombre alto, pintón, con botas, bombacha, chaleco y pañuelo al cuello en una mula. Nunca olvidaré el porte de este Sr. que no era tan mayor pero de mucha presencia dice “Baby”. Se presenta diciendo que era hijo del General Franco, el dueño de estos terrenos. “He venido muchas veces a Quines pues me dedico a comprar mulas en la zona y las vendo en Tucumán de donde con mi madre somos oriundos. Conozco muchas personas aquí y si bien siempre ando de paso hoy quise traerles esto. (Sacó un sobre de badana que contenía muchos papeles en su interior y se los mostró a papá). Estas son las escrituras del terreno que acreditan que esto fue de mi padre y como a nosotros no nos interesa y no vamos a hacer nada aquí quisimos con mi madre donárselo a Ud. Está todo firmado por escribano para que lo ponga a su nombre” fueron las palabras de este Sr.
Conversaron un rato y en eso Teodoro le pregunta si Manuel Franco (padre de la “Niña” Franco) es algo de él.
-NO, no somos parientes ni nada, solo tenemos el mismo apellido.

Leemos después los papeles que dejó este Sr. y eran fabulosos. No solo estaba la escritura y la donación sino que había manuscritos de actuaciones de guerra escritos por orden del General Franco. En esos manuscritos leíamos que él vino al mando de un ejército desde Buenos Aires con el motivo de llevar hombres a Tucumán para reforzar las fuerzas armadas que estaban allí. Este ejército acampa en el sector noreste de la plaza vieja en donde están las casas de Rubén Quiroga y de Tobares. El General Franco viene a dormir con unos oficiales en la propiedad del Colegio. Como a las 11 de la noche lo vienen a despertar y le avisan que los estaba asaltando otro ejército que venía de Córdoba para impedir que fueran al norte.
Lucharon toda la noche, mañana y tarde de ese día hasta que se retira el ejército Cordobés.
La batalla se libró en todo lo que hoy es la Plaza Vieja y la Plazoleta Sarmiento pues ambos ejércitos eran relativamente grandes (de aproximadamente 200 hombres).
Pasan los años y estando como intendente “Toto” Alume o “Loro” Olguín, no recuerdo, -dice “Baby”- lo buscan al “Flaco” Lima que haga un canal frente a la casa de la “Niña” Franco (Chichí Nievas) y haciendo ese canal encuentra un sable corvo.
Yo me entero dos días después y le pregunto al “Flaco” si era verdad a lo que me responde que Si.
- ¿Qué lo hiciste?
- Se lo di al “panza mora” –dice el “Flaco” refiriéndose a don Ramón “Pelé” Agüero.
Voy a verlo a don Ramón y le pregunto que hizo con el sable y me cuenta que estaba muy herrumbriento y lo comenzó al golpear hasta que le salió el herrumbre y una parte estaba muy buena y lo cortó para hacer un cuchillo de unos 35 cm. al que le puso de nombre “El San Martín”.
Otra relación que suponemos tiene que ver con el mismo hecho fue cuando jugando con “Chichín” Barrios en la parte de atrás de la herrería entre unas plantas de durazno que había mas o menos donde actualmente está el mástil del Colegio o un poco más allá de la palmera; cavando con unos palitos nos damos con un ladrillo; seguimos cavando y aparecen otros ladrillos en hilera. Llamamos al papá y como se interesó llamó a los empleados y limpiaron todo el lugar y se encontraron con una pileta de 3m. x 3m. mas o menos con una tapa. Descubrieron una parte y se encontraron con que estaba llena de huesos. Inmediatamente la taparon de nuevo y la dejaron como estaba. De esto supo el padre Juan y lo único que llegamos a suponer es que fueron los restos de los soldados caídos en combate.

¿Qué pasó con el terreno del Colegio?El Sr. este le deja todos los papeles a papá en ese sobre pero papá no le da mucho valor por que ya había comprado estos terrenos en donde yo vivo ahora –relata “Baby”- y con un crédito del Banco Hipotecario de la Nación hace construir la casa. (Esta el la primer casa de Quines construida con el Banco Hipotecario)
Después manda a llamar a José “Pepe” Regis que era de aquí de Quines (Fue el primer diputado peronista) y le pide que lleve los papeles que le dejó el Sr. Franco y haga todo lo necesario para hacer la donación de estos terrenos para un edificio Correo.
“Pepe” lleva todo a la Cámara de Diputados, se aprueba el proyecto de donación y pasa para la firma del Gobernador.
En ese momento nuestro país esta gobernado por Juan Domingo Perón y en 1955 comienza la revolución y como desencadenante la entrega del mandato en manos de los opositores revolucionarios.


En el proceso revolucionario, Quines está dividido en peronistas y antiperonistas y como parte de estos últimos nacen los Radicales del Pueblo. Estaban “Pepe” Magnano, don Casiano Hipólito García, Ángel Salcedo, Tulio Arce, etc.
Salían a realizar caravanas y protestas en contra del gobierno de Perón y en estas protestas se manifesta el padre Juan.
Ángel Salcedo encabezó la caravana cuando se enteran que fue derrocado Perón. De un lado llevaban la bandera Argentina y del otro la bandera del Clero. Allí iba el padre Juan.
En el camión de Tulio Arce iba el “Gordo” Masías apoyado en el estribo. Con una mano se sostenía del camión y con la otra sostenía la bandera y mientras la movía gritaba “¡¡¡Cayó el tirano, cayó el tirano!!!”.
La Plaza del centro tenía una tribuna frente a la iglesia y allí se detuvo la caravana a festejar.
En esos días fueron a Talita una noche en el camión de Tulio y con un cable de acero ataron el busto de Eva que allí estaba y lo sacaron a la rastra.Después hicieron lo mismo en Luján en la plaza de abajo. Uno de allí se fue al dique a avisarles a las cuadrillas que estaban trabajando y se vinieron en dos camiones. Los iban a acribillar. Hicieron lo mismo que en Talita y cargaron el busto y lo trajeron. Los lujaneros los persiguieron hasta La Aguada y allí los dejaron por que iban a tener problemas con la policía de aquí.
Frente a la Iglesia San José había tres álamos plateados. ¿Qué hicieron con el busto?
¡¡Lo ahorcaron en el álamo que estaba más grandecito!!!

Volvemos al terreno:Con todo esto y con los cambios de gobierno los papeles quedan para la firma del gobernador que nunca pudo ser.
En esos lapsos entra Tulio Arse como diputado provincial y allí se pasa la propiedad a nombre de la “Niña” Franco y ella después lo dona al padre Juan.
Lo sabía pelear al padre – dice “Baby”- y le decía:
- Padre, Ud. sabe perfectamente que no es el dueño de esa propiedad ni lo va a ser.
- A Uds. les faltaba la firma del gobernador –respondía-. Y aparte, ¿Qué querés hacer vos en ese terreno?
- Yo quiero hacer en el centro un reñidero y mas allá una linda cancha de bochas –le decía peleándolo y el padre se enojaba-.

En la esquina de esos terrenos sabía ser una posta para las diligencias.
La “Niña” Italia Flores fue mi maestra y tenía un libro de la historia de San Luis con una foto. Un día me llama y me dice mirá, esto a vos te va a interesar y me la muestra. Frente a la casa había una diligencia que recién llegaba o lista para salir y se veían unas ventanas alargadas con rejas de madera. Esa fue la construcción que conocí yo y en donde comienza a funcionar el colegio.

En el año 1952 nos cambiamos a esta propiedad (9 de julio entre Pringles y Belgrano)

LA POMPA FÚNEBRE DE TEODORO LLANOSApenas vino en el 36 comenzó a realizar los primeros cajones.
Cuando fallecía alguien venían y avisaban. El papá compraba las tablas en Garrofé y las cortaba a serrucho y armaba el cajón. Comenzaba aproximadamente a las 7 de la tarde y trabajaba hasta altas horas de la noche. Nosotros le ayudábamos mientras él iba haciendo la parte de herrería. A las 9 de la mañana ya se entregaba pulido y todo.
Después Teodoro compra una capillita (pedestal con una cruz regulable en altura) con candelabros torneados para los velatorios. De fondo se colocaba un paño negro. Esa era la costumbre.
Con el tiempo compramos la capilla de bronce –dice Baby- con un retablo y 6 candelabros de bronce. Cuando se dejó este oficio cambié 4 candelabros por estaño a un vendedor y me dejé dos.
Al hacerse la capilla del convento Mater Dei Martín le comenta a la madre Gabriela que tiene dos candelabros de bronce y la Madre me los pide prestados. Ella se fue y los candelabros quedaron allí.

Algunos trabajos que hizo mi padre como carpintero fue por ejemplo el palco para la fiesta de la Vendimia.
Era impresionante; tenía tres niveles. Un primer nivel donde estaba el locutor, después donde estaban los artistas y el último nivel donde estaba la reina.
Trabajaron en ese escenario como ayudante de Teodoro: “Barrosito”; Mateo Alacha (un yugoslavo de Servia muy guapo y socio de Leon Brachiocurti) y “Chichín” Barrios.
Este festival fue declarado Fiesta Provincial pero se hizo solo una vez.
El presidente de esa comisión fue Carlos Amodey y uno de los principales impulsores don Matiu (el francés que tuvo la esparraguera).

Todas las cabreadas del Datilero también las hizo Teodoro con madera de grapia.
Cuando lo inauguraron vinieron delegaciones de tres países:Egipto, Libia e Israel (si mal no recuerda Baby)
Le entregaron a cada representante de las delegaciones una placa de granito negro que Baby tuvo que incrustar en madera de retamo para que adquiera otra presencia.
Otros aspectos de su vida:
En la casa del colegio funcionó el Juzgado de Paz. Cuando se enrolaron las mujeres Teodoro estaba como Juez de Paz. En ese momento trabajó como nunca.

Enero del año 1955 o 1956 estaban jugando a las cartas Teodoro, Rubén o “Pipo” Arce, Sinibaldo Tobar, Pablo Chacón y Gumersindo Barrios y estaban próximos a las fechas de carnaval.
-Hagamos un carnaval –propone uno-.
Se organizó la comisión y hicieron el carnaval. Gumersindo tenía un Fort T y Chichín se lo pidió e hicimos un barco de unos 6 metros con varillas de hierro y lo forramos con bolsas de alpillera. Esa fue nuestra carroza y nosotros disfrazados de marineros arriba recuerda “Baby”.
Reunieron el dinero de la recaudación, pagaron todo y les sobró plata. ¿Qué vamos a hacer? –se preguntaron-. Allí surge la idea de dársela a una persona que la necesitara y se la dieron a una señora muy pobre que les pareció que de todos ella era la que más la necesitaba.

En 1950 fue concejal.

Pascual Amilcar “Baby” también fue concejal electo en los comicios del 14/5/89.
En 1991 va como candidato a intendente por la U.C.R. y gana Di Franco por 71 votos. En esa oportunidad Gianello y “Cholo” Turri iban como concejales titulares.
Por una situación personal en agradecimiento al gobierno de Eva Duarte de Perón y su fundación por los niños, trabajó un año para el peronismo. Relata Baby que siendo niño se golpeó en la bici y estuvo 20 días sin conocimiento en el Hospital de San Luis. En ese momento era gobernador Víctor Endeisa (amigo de mi viejo y sabía venir aquí). Mi padre no le había comentado nada y él se entera por otro que estaba en el hospital conmigo golpeado. El gobernador va a vernos y habla directamente con Eva a las nueve de la mañana y a las 16 hs. del mismo día vino un avión de Chile con el medicamento que necesitaba. Tenía una deuda con ella y es por eso que la pagué trabajando un año para ese partido.
Fue dos veces presidente del Club Santa María. En el primer período pide una audiencia con el gobernador Elías Adre a quién conocía y le expresa: “Soy el presidente de un Club y tengo una ambición, quiero poner la luz pero no tenemos plata ni nada.
- ¿Tenés algún proyecto?
- No, si hay alguna posibilidad hacemos un proyecto.
Llama a una señora y le explica y dice: - Les vamos a dar todo lo necesario. Vos encárgate del proyecto y todo el material que necesiten quiero que esté antes de 30 días puesto en Quines.
Así fue. Trajeron todo y como yo renuncié eso quedó tirado. Pasaron los años y después de una reunión en la Cooperativa en el año 73 o 74, cuando querían poner las antenas parabólicas, voy a la cancha ya que se reunían y había un asado y caí como presidente de nuevo. Fue en ese período cuando fui a Córdoba y compré lo que estaba faltando por que se habían llevado algunas cosas y pusimos la luz. Para la inauguración hicimos un campeonato nocturno de papi y baby fútbol. Fue hermoso.
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MARÍA MAGDALENA FRANCO

LA “NIÑA ÑATA” FRANCO
Como la historia no es unidireccional voy a entrevistar a Elio Argentino “Chichí” Nievas con respecto a lo relatado por “Baby” Llanos y encontrarme con la otra versión de la historia.

Para comenzar nos ubicamos en la familia de la Niña Franco:
Su nombre es María Magdalena Franco y fue hija de Manuel Franco y Audelina Nievas.
Audelina es hermana de:
- Felix Valois; Onorio (padre de Elio Argentino “Chichí” y Jesús);Santos; Leonides; Rodolfo (padre de “Pocho” y hnos.); Felicinda; Humberto y Rosa Nievas de Álvarez.

Todos ellos hijos de Fidel Nievas y de Matilde Cabáñez y tíos maternos de Margarita. Los que conocieron a la “Niña Ñata” pueden asegurar que era una excelente persona, generosa, amable y colaboradora en Sociedades de Beneficencia y Comisiones varias. Es nombrada por la escritora María Delia Gatica de Montiveros en su libro “Rescatando la memoria de la mujer puntana” (ver en ediciones imperdibles de este Blog).
Adopta como a sus hijos a sus pequeños primos hermanos Elio Argentino “Chichí” y Jesús cuando “Chichí” queda huérfano de padre a los dos años de edad.
Le consulto a Elio Argentino como se da la situación con Teodoro Llanos y la donación del terreno al padre Juan.
“Chichí” me comenta que Teodoro alquilaba la propiedad y estando muy involucrado en la política, le pide a su amigo peronista José “Pepe” Regis que pasen a su nombre la propiedad. “Pepe” aparentemente se quiere adueñar de los terrenos y los intenta poner a su nombre.
La “Niña” se entera de esto y conversando con Justiniano Amaya, este la aconseja que se vaya a San Luis y busque al Dr. Flores de parte de él.
La “Niña” sigue su consejo, consulta al Dr. Flores y analizando la situación y seguramente los documentos le pide que no permita que “Pepe” Regis ingrese a la propiedad y que no tuviera miedo que todo se solucionaría a su favor.
A todo esto Teodoro Llanos se cambió a la propiedad que adquirió en 9 de Julio.
Sobre la calle San Martín la propiedad tenía unas piecitas que le alquila por un tiempo a Temer Jacobo en donde pone una verdulería. Después le alquila a Tulio Arce una parte y la otra al primo de este: Darío Arce que pone una carnicería.
Paralelo a esto la “Niña” hace construir una piecita para el lado del Club para que viva allí su hermano de crianza Juanillo Garay pero estuvo solo por unos meses por que después se va a Mendoza.
Cuando sale todo a nombre de la “Niña”, el padre Juan se interesa por la propiedad para fundar el colegio y le propone construirle una casa en el mismo terreno. La “Niña” sabiendo que era para este fin le dona toda a propiedad sin nada a cambio.
Un aula del Instituto “San José” lleva su nombre en reconocimiento por la donación de los terrenos.
¿Que sacamos en conclusión de todo esto?:
- Que la donación de Margarita Franco es real y efectiva.
- Que Teodoro Llanos no tenía intención de edificar nada allí y pensaba donar los terrenos solo que para otro fin: El Correo.
Lo lamentable es la pérdida de los documentos que relatan la batalla acontecida en esta localidad y los motivos que impulsaban a los dos bandos.



JOSÉ "PEPE" REGIS

Al mencionarse por un vecino el nombre del legislador “Pepe” Regis recordando lo que a su parecer fueron los hechos ocurridos, lo hace dejando mal a su persona y a modo de descargo, el hijo del legislador: José Francisco Regis me escribe una carta ejemplar, inolvidable para mí y ofreciéndoles, a él y por su intermedio a su madre y demás parientes las disculpas del caso, le pido permiso para publicarla a pesar de solicitarme que no se tenga en cuenta el nombre de su padre en la Historia de Quines ni el de él por no ser una persona mediática.
A modo de respuesta me aclara que no pretende con este descargo buscar culpables y rencor en nadie. Solo expresa lo que han vivido como familia y manifiesta maravillosamente parte de la vida y obra del legislador. Allí mismo me autoriza a publicar la carta de la siguiente forma:
… “Asimismo, debo destacar mi poca adicción y como mi padre, a ser una persona mediática no obstante ello con la anuencia de mi madre, Ud. como me lo solicita tan respetuosamente, no tenemos inconveniente alguno en que publique lo que crea conveniente, siendo mi deseo de unir y no dividir en temas tan importantes y sensibles que pudieran afectar a persona alguna; pero de una sola cosa este seguro amigo, ratifico la veracidad de lo expresado, ya que siempre como debe ser, sin tergiversar ni ocultar absolutamente nada en relación al tema que nos ocupó.-”

“Pepe” como lo conocían casi todos vivía en Quines, en la calle Moreno entre 25 de Mayo y Sarmiento en donde actualmente es la casa de Fernando Tarazi me comentaba Marcelo de Dio.

Complementando la carta, José Francisco me envió el certificado de asunción como legislador y un recorte digitalizado del diario en donde habla del contundente triunfo electoral de su papá.
Dejo con ustedes la carta que más que una carta es un valioso documento.

Mina Clavero, octubre de 2012
Al señor Marcelo García
Presente

Por la presente, quien suscribe José Francisco REGIS, elevo a Ud. esta especie de aclaración y/o descargo en lo relacionado a su documentación en cuanto a la Historia de Quines y sus personajes.-
En primer lugar debo felicitarle por el trabajo realizado sobre el tema de marras, ya que de una forma u otra transcribe parte de lo acontecido por varios años a esta parte en ese querido y amado pueblo, el cual tuve el privilegio de habitar de niño hasta los dieciséis años aproximadamente.- Pero claro está, al leer el blogs en lo concerniente a “LA NIÑA FRANCO” una persona hace una acusación direccionada a mi padre, la cual con total firmeza, sé que fue infundada, mal intencionada, falaz, y totalmente irrespetuosa; ya que menciona que mi padre se quiso apropiar o lo que es lo mismo a mi entender “robar” un terreno perteneciente a la Niña Franco; lo cual enterado de esto, lo consulto con mi madre que reside en la Ciudad de Villa Dolores a lo que me responde:
- “Hijo, papá jamás se hubiese prestado ni tan siquiera hubiera tenido la intención de apropiarse de un lote de terreno de la Niña Franco en beneficio propio ni de algún tercero” y a propósito, ella recordaba que los mismos le habían sido donados al Cura Juan…
Atento a esto me pregunto: ¿Por qué esa persona no realizó la correspondiente denuncia en tiempo y forma?
¿Acaso pensó que mi padre por ser legislador tenía algún privilegio y/o inmunidad alguna?
Con solo decirle que mi padre no portaba la chapa patente en su vetusto auto a sugerencia de la Cámara de Diputados, a efectos de no tener ventaja alguna y adecuarse como cualquier ciudadano a tributar con el pago correspondiente por tal concepto.-
Seguramente ese señor no sabía, que mi padre fue elegido por la mayoría, obteniendo más votos que el mismo líder, del cual era su amigo personal y jamás se aprovechó de tal circunstancia para tener algún privilegio (para mayor claridad adjunto al pié de la presente lo mencionado precedentemente) como así también lo unía una gran amistad con Evita, a punto tal que conservó una fotografía en la que mi padre acompaña con orgullo y mucha tristeza, a un abanderada de muchos humildes, empuñando el féretro hasta su última morada.-
Seguramente ese señor no sabía, que mi padre renunció a ser elegido por un nuevo periodo, y no precisamente por estar en la opulencia, sino, por no estar de acuerdo en ciertos planteamientos de sus pares, ya que para él, la prioridad era la gente que lo eligió para que los representara dignamente por el Departamento Ayacucho, atento a que siempre su consigna era hacer y no decir, realizar y no prometer.-
Seguramente ese señor, tiempo después se iluminó por las noches, gracias a que mi padre trajo, instaló, puso en funcionamiento, capacitó e instruyó a personal para que toda la zona gozara de un servicio tan esencial, por citar algunas de las obras que realizó.
Seguramente ese Señor, desconocía que fui testigo, de largas e interminables noches en que mi madre cosía y bordaba con academia de corte y confección incluída, a fines de ayudarle a mi padre en el mantenimiento de nuestro humilde hogar.-
Seguramente ese señor desconocía, que mi padre compraba hierro, bronce, plomo, zinc, etc., para luego después realizar un largo viaje de días a Rosario en el viejo camión GMC, para “Acindar” circunstancia ésta, que me quedó marcada, ya que era tal el peso de la carga que muy seguido se rompían gomas, palieres, a lo cual don Juan Domingo (era el peón ayudante) en nuestro dormitorio, que era bajo el camión, aprendí a fumar armado con solo ocho añitos, ¿para qué?...
Sí, adivinó amigo, para mitigar el hambre de uno y/o dos días hasta que mi padre llegaba a dedo con el repuesto y un salamín con un pedazo de pan y queso.- Y todo ello para llevar un poco de sustento a mi hogar.- Pero sin haberle querido robar un lote a la Niña Franco.-
Seguramente ese señor desconocía, claro está, que fui testigo en numerosas oportunidades en que no nos alcanzaba la azúcar existente en mi casa para endulzar mi taza de café con leche y el de mis hermanas, ¿por qué? Mi padre decía que a Juan Domingo no le podía faltar para su mate cocido, acción ésta en la que todos nos sentíamos contentos, felices y por sobre todo con mucha paz interior.- Pero sin haberle querido usurpar un lote de terreno a la Niña Franco.-
Amigo, tengo cincuenta y cuatro años gastando las suelas de mis zapatos por este mundo, pero creamé que lo hago con el pecho inflado y la frente bien levantada para llevar con mucho orgullo el apellido que mi padre me dio; ese peronista hasta los huesos, en los que jamás le observé discriminación alguna, ni tan siquiera en lo político, en su vademécum no tenía acceso la hipocresía, la envidia, pero sí la rectitud, a tal punto que en esa época la palabra tenía más validez que algo refrendado por escrito; Seguramente y sin temor a equivocarme como todo ser humano tuvo sus errores, pero con una convicción y una seguridad total de lo que hacía.

Al morir, no pudo como hubiera deseado dejarnos algo material, pero que importa amigo, si me dejó lo más precioso que puede existir, el respeto sin límites por las personas, las instituciones, los valores, en definitiva la sociedad toda, por ello: mi deseo y seguramente el de mi padre es de solicitarle a Ud., no ser tenido en cuenta en los personajes destacados del pueblo, precisamente por no ser una persona mediática, (aclaro que los restos de mi padre, a voluntad de mi madre descansan en el cementerio del pueblo, en un mausoleo levantado con mi hermanastro, asiendo notar que en diversas oportunidades mi hermana Marisa, se apersonó a la administración central de turno, no logrando que se nos cobre el impuesto correspondiente por ser la figura de mi padre – lo cual no comparto, ya que siempre nos allanamos a derechos y obligaciones como cualquier ciudadano común.)

Amigo, me consta mi padre se encuentra de frente, observando, velando y anhelando un adelanto y un progreso sin igual para ese querido y amado pueblo de Quines, con más y mejores obras y servicios, como así también un mejor bienestar para todos sus habitantes que bien merecidos se los tienen.-

Sin más, buena es esta oportunidad por este medio, para enviarle en nombre de mi madre un fraternal y emotivo abrazo a toda la comunidad Quinense, y desearles un próspero y mejor año 2013 llenos de riqueza y felicidad.-
Pero claro está, sin haberle querido usurpar un lote de terreno a la Niña Franco.-
Hasta siempre.
Anexo a la Carta.

¡Gracias al Sr. José Francisco Regis!



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LA ESPARRAGUERA DE DON MATHEWS

La firma Mathews y compañía sin dudas que fue una de las mejores que llegaron a nuestro pueblo. Con verdaderas ganas de trabajar y de dar trabajo. Competitiva, con un buen control de sus obreros y una remuneración acorde al trabajo que desempeñaban.
Tenían un sistema productivo muy bien armado con explotación de olivares, producción de alcauciles, choclos y espárragos entre otros productos.
La firma era una sociedad de Mathews y Fernández. Este último, proveniente de Tandil – Buenos Aires, vivía en el chalet de Tulio Arce con su familia. Era un gringo medio morocho y alto. Tenía dos hijos, un varón y una nena que cumplió aquí en Quines los 15 años.
Los que conocieron a Fernández aseguran en su totalidad que era una excelente persona, con valores muy altos. Un hombre que jamás se dirigió mal a alguno de sus empleados y con un don muy especial: El de aconsejarlos para bien.

LA COSECHA
Desde Quines iban aproximadamente unas 50 personas a la cosecha.
En Julio se trabajaba con la aceituna. En agosto con el alcaucil y desde septiembre hasta diciembre con el espárrago y posteriormente con el choclo.
Jorge Nicolás Flores trabajó allí en el año 1974 y recuerda que de aquí iban Ibar Reynoso, Ramón Héctor Moreira, Luis Cevallos, Elías Becerra, Bernardo Ochoa, su hermano y su papá Próspero Ochoa.
El espárrago se sembraba a ambos lados de un surco de 40 cm. de ancho por 30 de alto. La plantita casi no se veía ya que solo salía a la superficie un tallo de unos 10 cm. y como tenía un tiempo justo se cosechaba en seco, regado, como esté. “Si nos teníamos que embarrar nos embarrábamos, si teníamos que estar bajo la lluvia, estábamos” cuenta Jorge Flores.
Se cosechaba con una herramienta (una especie de gubia) de unos 40 cm. con cabo y en la punta tenía como una especie de cuchara con filo; esta se clavaba en la tierra a la altura de la base del espárrago, se hacía una pequeña palanca a la herramienta y allí se elevaba el espárrago y con cuidado se sacaba y lo colocaban en el canasto de mimbre. Lleno el canasto se descargaba en una batea metálica y cuando se llenaba el tractor la llevaba al galpón.
A las 5:30 de la mañana esperaban el transporte que en esos años lo hacía Marino Ortiz que le había comprado un camioncito a Pancho Rodríguez. Todos subían, arrancaba y ya no tenía parada por que si se detenía el motor no arrancaba más. A las 6:00 comenzaban a trabajar hasta la hora 21:00 con un descanso de una hora para almorzar.
Jorge Flores recuerda que junto a Ramón Héctor Moreira viajaban con Fernández en una coupe Chevi ya que eran muy regalones de él. El capataz era un señor de apellido Tesino que controlaba cada surco mirando que se cosechen absolutamente todos los espárragos. Arrancaban todos en una punta e iban parejito avanzando por los surcos. Algo característico era que nadie se quedaba atrás, nadie hacía la maña ni se tiraba a chanta. Éramos tan bien pagos que trabajábamos con ganas y todos queríamos estar y cumplir de lunes a domingo. Yo comía algunos espárragos –dice Jorge- y al preguntarle que sabor tienen me dice que es muy particular, una mezcla de ajo y cebolla. El sustento del espárrago era tal que salíamos de trabajar y a la noche nos desvelábamos sin ningún problema.
Para tener una idea de lo que se cobraba Jorge me lo ilustró perfectamente: Yo comencé en septiembre y el 23 de diciembre se terminó con la cosecha. Fernández me había aconsejado que no retire toda la plata de la quincena. Que retire lo que gastaría en las salidas de fin de semana y algunos gastitos extras y así lo hice. El 23 de diciembre cuando fui a cobrar tenía 1.400.000 pesos y una camioneta F100 o una C 10 costaba 1.250.000 pesos.
¡Cualquier obrero de la firma Mathews y Cía. al terminar la temporada de los espárragos podía comprar una camioneta 0 Km.!
Además Jorge trabajó en el alcaucil desyuyando y el cuidado que había que tener era el de no arrancar ninguna planta de alcaucil con el asadón. Estas plantas tienen unos 50 cm y largan una vara y en la punta de esta está el fruto. Nos controlaban los surcos y si había una planta marchita nos llamaban la atención. El capataz no necesitaba nombre ni número de surco, cuando revisaba los surcos que ya estaban trabajados. Lo hacía mirando los rastros.

El operador de Caldera era Juan Rinaldi.
“Lolo” Ochoa vendía la comida y la bebida. Se juntaban en pequeños grupos y compraban dos vinos y una Mirinda y ¡A comer se ha dicho!
La Secretaria era Graciela Rosini y los empleados alababan su efectividad y su capacidad para el manejo del dinero. La oficina de la firma estaba en el centro a la altura de la casa de Abel Barroso.

LO DESTACABLE:
• Había un clima de respeto único desde los dueños hasta el último obrero.
• Cada uno se ocupaba de su trabajo.
• Allí no se prestaba para que se formara ninguna parejita ni nada por el estilo.
• Si se llamaba la atención a alguien lo hacían correctamente sin levantar la voz ni decir ningún tipo de mala palabra.
• Los dueños eran muy guapos por lo tanto no se podía esperar menos de los empleados.

Cuando Fernández se fue le vendió a Jesús Iruela el camión Mercedes 1112 que tenía. Después llegó un Sr. de apellido Santo Colombo proveniente de Río IV y más o menos por allí fue el final de la producción. Este Sr. puso un Estudio Contable en los locales de Jorge Tarazi.

Página para visitar:
http://www.inta.gov.ar/ies/docs/doctrab/DT_05.pdf

Aquí se realizaba todo el proceso: Cultivo, cuidados, cosecha, lavado, clasificado y embasado y etiquetado. La marca era "Vanbo"

Gracias a Dios podemos ver en fotos la mayor parte del proceso.



Camino al cementerio vemos a mano izquierda el galpón que funcionara como la fábrica de envasado de espárragos y choclo en grano entre otros productos. Su dueño fue un francés apellidado Mathews (Don Matiu lo llamaban)





Fotos proporcionadas por Dante Gatica.
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FIESTA DE LA VENDIMIA

Los responsables de la firma Mathews fueron los primeros impulsores de la realización de la Fiesta de la Vendimia. Una fiesta fenomenal y nunca vista en nuestra localidad. Esta fue la primera y única. Fue declarada Fiesta Provincial y según referencias data del año 1964.
Los demás organizadores fueron los dueños de la bodega que posteriormente fue adquirida por don David Alume. Ellos fueron Armando Abed y los hermanos Patricio, Andrés y José Simón.
Más abajo hablaremos de ellos.
El escenario tenía tres niveles y esta ornamentado con barriles de madera y plantas de vid en la parte más alta y plantas de dátiles en el piso.
Fue construido a pedido de don Carlos Amodey (presidente de esa comisión), por Teodoro Llanos con sus ayudantes: Simón Antonio Barroso o "Barrosito", Mateo Alaches (coterraneo del padre Juan y Antonio Ogrin) y "Chichin" Barrios. Su ubicación estuvo en la intersección de las calles San Martín y 25 de Mayo donde últimamente se coloca el escenario para la Fiesta de carnavales.

El cartel fue elaborado por Rafael Alberto "Tito" Montiveros. .

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La bendición de los frutos estuvo a cargo de un recientemente llegado Juan Ogrin. Se pueden apreciar una foto desde abajo y otra desde el escenario.




La Reina de la Vendimia fue y es Elena Abaca (mamá de Mariela Lucero). Una vez consagrada Reina permaneció en la parte mas alta del escenario preparado especialmente para la soberana.



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Ingreso de las Agrupaciones Gauchas
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El público presenciando el maravilloso espectáculo.
Algunos de los conjuntos folclóricos que estuvieron fueron el Dúo Romero y los hermanos Díaz de Villa Mercedes.

Un agradecimiento especial a Dante Gatica, Liliana Moreno
y a "Baby" Llanos por este pedacito de historia en fotos.





BODEGA AYACUCHO


 

La Bodega de Alume fue anteriormente de la sociedad de Armando Abed y los hermanos Patricio; Andrés y José Simón.
José y Andrés no vivieron aquí, venían a dar una vuelta siempre desde Mendoza.
Patricio Simón era casado con Josefina “Fina” Fernández y la Sra. de Armando Abed era apodada “Coca”.
Primero tuvieron una fraccionadora en donde estuvo el hotel Jacobo, Sosa y posteriormente Olmedo.

Al vino lo traían de Mendoza en tanques de 200 litros. La propiedad cree Norma Ávila que se la alquilaban a un Sr. Romero. Luego compran la parte de atrás y en el año 1962 construyen la bodega. Para la misma sacan un préstamo al banco y como consecuencia de eso después entran en decadencia y posiblemente termina siendo rematada.
Francisco “Pancho” Arvoy fue el enólogo. Atendía varias bodegas en Mendoza. Viajaba permanentemente.
Los terrenos abarcaban todo el sur de la manzana y la casa (Hotel) frente Ramón Rolando "Coya" Miranda.
Faenaban Chanchos y facturaban o sea que hacían chorizos, arrollados, jamón, etc.
Trabajó con ellos “Chabela”; Alba de Bustos (Mamá de Silvia y Mónica ) y José Manzano (es en este lugar donde conoce a su esposa Norma).
Tenían una finca y los encargados eran Tomasa y el hno. mayor de "Minino" Olmedo.
En las fotografías tomadas ya siendo la bodega de Don David Alume se aprecia la llegada del camión con uva, su descarga en un gran piletón de donde era elevada en cinta transportadora para su molienda y demás procesos de la misma.



A continuación los dejo con un texto escrito por el Ing. José Cabáñez y posteriormente una carta escrita por el Dr. Hugo Said Alume al diario La Nación:

El siguiente artículo se publicó parcialmente en Revista HOY el norte puntano - Año 0 – Nº 1 - junio de 1996. El que a continuación transcribo es el informe completo proporcionado gentilmente por el Sr. José Cabáñez.


LAS VIDES DE QUINES Y EL SUEÑO DE MAH-LULÚ

"...Y en la bodega de Don David, todita esa uva, vino se hará..."
Cuando todo los temas trascendentes del nivel nacional pasan inexorablemente por la tan remanida "revolución productiva", mudo testigo y pricipalísimo protagonista potencial, se yergue en Quines la única bodega en producción de la provincia de San Luis. Su fachada con letras borrosas por la acción del tiempo sugiere una grandiosidad antigua que ratifica lo de "todo tiempo pasado fue mejor".
Remando en el origen más remoto ubicamos un pequeño pueblo de un valle montañés, vado en la ruda geografía de Siria, y al que solo se podía acceder por una estrecha garganta rocosa, el mismo acceso que el joven David Alume traspuso allá por 1920 para iniciar la aventura de la "América" dejando atrás su querido pueblo de Mah-lulú. Largo periplo marítimo lo llevaría a Buenos Aires y luego a otro "pequeño pueblo de un valle montañés", San Francisco del Monte de Oro. Allí, junto a su hermano Jacobo inicia la tarea de elaborar y comercializar pan y pronto intuye que alcanzaría la posibilidad de progresar y desarrollar su industria radicándose un poco más al norte, en Quines.
Conoce allí a Elvira Fara, con quien se casaría en 1930 y con su emprendedor espíritu de comerciante su actividad mercantil se diversifica agregando ramos generales a su local, constituyéndose por aquel entonces en uno de los proveedores habituales de las centenares de familias que conformaban el pueblo.
Lo que sigue es historia conocida por quienes habitan la localidad de Quines, la evolución de la familia con los hijos que llegan, José Edgardo "Toto" (58), intendente municipal de Quines en distintos períodos, Mario Reyes "Chocho" (57), comerciante y diputado constituyente provincial en 1957, Berta Elena (55) y Hugo Said (52) doctor en medicina radicado en Capital Federal, miembro del equipo del doctor Favaloro y un poco el "cónsul" de Quines en Buenos Aires por su predisposición para asumir los casos de pacientes locales en la gran ciudad con la mayor solidaridad y dedicación.
Y con los hijos la evolución económica, el "viejo almacén" que se transforma en un local comercial, la inclusión en la agroindustria con la producción e industrialización de espárragos y alcauciles para exportación, la exportación de la "viña de Don David", que desde antes de mediados de siglo estaba en producción, ubicando a partir de 1952 sus vides en bodegas de Villa Dolores y Cruz del Eje, a partir de que un informe del Banco Industrial y Banco Nación incluyen a la región puntana como "zona de producción".
En Diciembre de 1962, el enólogo Antonio Vaca Coll con la colaboración de funcionarios provinciales del Gobierno, técnicos del Instituto de Vitivinicultura y productores, produce un informe que en su parte sustancial y en referencia a la zona norte expresa: "El suelo muestra variaciones en su composición al pie de la sierra, es de tipo franco-arenoso y ligeramente arcilloso, poroso, de rápido drenaje, algo calcáreo y muy rico en humus y medianamente rico en nitrógeno, fósforo y potasio, sobre todo el de Quines, de tal manera que generalizando podemos decir que la zona más apta por su calidad de suelo y que permite cultivos más variados es la de Quines". El mismo informe detalla más adelante la existencia de "11 propiedades con plantaciones de vid sistematizadas de espaldera 4/5 hilos y parral tipo sanjuanino por un total de 120 has con variedades: criolla especial, cereza, moscatel blanco y rosado, torrontés, Pedro Giménez, Lambrusco, Tempranilla, Pinot, Barbera, etc., siendo los productores destacados en esta zona: Quines S.A. con 50 has, David Alume con 18, Simón Abed con 7, Amaranto Oviedo con 7, Osorio-Petrino con 6, Matius con 6 y el resto son superficies menores a 5 has."
En las conclusiones el técnico Vaca Coll estima "buena productividad en general con rendimientos para la zona norte de 18 a 22.000 Kg. por hectárea y una producción anual de 400.000 kg., existiendo en esta zona una sola bodega de una capacidad de 480.000 litros, lo que significa que sólo la producción del norte podría ser industrializada momentáneamente en la región, teniendo en cuenta que la zona centro tiene además una producción de 250.000 kg. de vid".
En el párrafo final dirigido a los responsables del crédito bancario, afirma que "el cultivo de la vid en la zona estudiada puede dar resultados altamente satisfactorios, permitiendo su explotación en escala industrial y creando así fuentes de trabajo y producción por lo que el apoyo crediticio puede fomentar e incrementar la naciente industria vitivinícola en San Luis".
En 1962, Abed había iniciado la construcción de una pequeña bodega a escasas dos cuadras de la plaza principal de la localidad, a raíz de dificultades económicas en 1965, el Banco Provincia otorga la titularidad del paquete accionario a un consorcio formado por las firmas David Alume e Hijos, Quines S.A., Mathews y La Lomita S. A., estando a cargo de la cesión el entonces presidente del Banco Provincia, señor Luis Fontana, "un banquero en todo el sentido de la palabra" según la expresión de "Toto" Alume.
Prolongados y penosos trámites se sucedieron tropezando durante años con la burocracia administrativa, recién en 1971 concluyó la gestión y se extiende entonces autorización por parte de los entes oficiales. Poco tiempo después las firmas asociadas se desvincularon, quedando David Alume e Hijos como única propietaria de bodegas Ayacucho.
Desde entonces la bodega ha estado permanentemente en producción, con excepción de aquellos períodos en que por el granizo o la sequía no había vendimia como ocurriera el año pasado.
El enólogo que supo en marcha la bodega fue el técnico sanjuanino Bernardo del Pie y actualmente esa tarea está a cargo del enólogo Jorge Martínez.
Las instalaciones iniciales se ampliaron y "hoy tenemos la infraestructura para elaborar y acopiar 7.000.000 de litros de vino merced a nuevos depósitos construidos con fibra de vidrio, -asegura "Toto" Alume.
Allí se procesan distintas variedades de uva, siendo las principales del tipo moscatel y Barbera y de mesa, "provistas por nuestro propio viñedo y algunos productores de la zona de San Miguel y Candelaria, como Montilla, Giménez, Ruarte y otros", alcanzando un total de 1.000 toneladas por año.
"Toto" Alume, socio gerente de la firma, continúa diciendo: "Nuestro promedio de producción ronda los 500.000 litros en calidades común y reserva, teniendo nuestro mercado principal en Córdoba, provincia de Buenos Aires y San Luis; el objetivo es poder aumentar el volumen de producción y para ello obviamente es necesaria una agresiva política de comercialización que seguramente con la anunciada reactivación del Norte se tendrá que estudiar este perfil productivo de nuestra zona, máxime cuando las bondades de nuestro microclima nos permiten obtener uva de óptima graduación, estamos llegando a los 14º, valor idéntico al de las uvas riojanas".
"A nivel nacional -continúa diciendo Alume- estamos en la Cámara Argentina de la Alimentación de la UIA, a través del doctor Augusto Alume, quien integra la comisión con carácter de titular, representando a las bodegas y viñedos Ayacucho".
Finalizando el diálogo, recorremos las instalaciones comerciales de la firma, notando la emoción con que "Toto" describe lo que fueron el primer local comercial y la "vieja" hoy remozada "cuadra" de la panadería.
Don David terminó sus días el 19 de septiembre 1980, a los 80 años de edad, dejando una herencia de esfuerzo y sacrificio, la herencia del tesón de aquellos pioneros que no dudaron en dejar sus patrias de Oriente para sembrar en este suelo la semilla del progreso. Por eso... el vino de Quines nació en Mah-lulú.


Ing. José R. Cabáñez
En simple y clara loa cantaré al rojo vino
porque abrevia y endulza las leguas del camino.
Corona mi merienda de risa y alegría
y limpia de cansancio los trabajos del día.

Después puebla las noches, luminosas y aldeanas
de guitarras unidas a llenas damajuanas
(cada copioso trago dos ojos abrillanta
afina una guitarra y aclara una garganta).
¡Oh! rubor del vaso colmado de buen vino,
con el cual veo muy suave el áspero destino.
¡Por ti no lloro ya desdenes de niña
y complacido espero los dones de mi viña!
Antonio Esteban Agüero



LA PULGA - Nº 72 – Año 6 – Abril 2002

EL MENSAJE DE DON DAVID
Del Correo de Lectores de La Nación, Febrero 18 de 2002
Sr. Director
Mi padre nación en Malula (Siria), un pequeño pueblo cristiano donde se habla el arameo, el idioma de Cristo. Seguramente un signo que marca genéticamente y ancestralmente a las personas. Yo lo definiría como “un santo laico”.
Ya jubilado de sus negocios, por instancias de mis hermanos que querían liberarlo de su fatigada vida de trabajo, se dio a plantar una viña de 20 has. Y la llenó de árboles frutales. Entre ellos, nogales.
En un recorrido en el que lo acompañaba un empleado, le dijo: “Don David, ¿para qué planta nogales?” Mi padre mi miró, y esbozó una sonrisa (los nogales tardan 10 años en dar sus frutos y el empleado le expresaba su inocente advertencia).
Varios años después y recogiendo la cosecha de las primeras nueces, mi padre me recordó el episodio y agregó: “Hay que plantar nogales. Hay que sembrar esperanzas”
En esta hora de incertidumbre donde nos duele nuestra argentinidad, debemos preservar nuestra salud mental, reconfortar nuestros espíritus, fortalecer nuestra misión solidaria, ayudar a la gente, aprender a querernos y respetarnos. Ser lo más dignos posibles para acometer esta formidable crisis. Plantar nogales, sembrar esperanzas.

Dr. Hugo Said Alume
(Hijo de Don David Alume de Quines)



"CHAMAMÉ" - EL CAMIÓN DE LOS ALUME

Le llamaban "Chamamé" por lo corcoveador y saltarín -relató Hugo Said Alume en algún momento-. Mi padre (por David Alume) prestaba en él un servicio un poco raro: Transportaba, gratuitamente, a las personas que fallecían, hasta el cementerio.


En la caja: Manolo Arce; Rubén Arce; Marcos Arce; Jorge Tarazi; Mario Reyes "Chocho" Alume; Manelo Arce y Trompín. 
En la cabina: José Edgardo "Toto" Alume; Eduardo "Lalo" Rodríguez y ......
Gentileza de Mario Luis Alume

2 comentarios:

  1. franco orlando arce25 de enero de 2012, 14:34

    muy muy bueno espectacular el articulo!!! buenisimo muchisimas felicidades para quien se tomo el trabajo de recolectar semejantes datos de nuestro querido Quines.

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    1. Gracias Franco. Me agrada hacer esto y cada vez que puedo voy actualizando o agregando algunos datos. La verdad es que son pocos los que se animan a realizar algún comentario y esto sirve de mucho ya que es un aliciente para continuar y más todavía a los que se animan a aportar datos, fotos o algo de interés para agregar al blog.

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