DATOS HISTÓRICOS DE QUINES por JESÚS LIBERATO TOBARES

Todo lo que escribe el Sr. Jesús Liberato Tobares tiene antecedentes documentados y cita las fuentes de donde recolectó la información pertinente, siendo así posible rastrear esa información ya sea del Archivo Histórico provincial y en los Boletines Oficiales, etc. y verificarlo.
Sobre la veracidad de las fuentes se puede discutir largamente y discutir, sobre todo si los relatos orales son confiables o no. En nuestra historia, sobre todo lo que tiene que ver con que el nombre de Quines derive de un cacique e inteligentemente coloca: el término “derivaría” (en potencial), y lo que tiene que ver con las familias fundadoras que menciona ya que hay documentos más antiguos probatorios de que ya hubo familias anteriormente.

A continuación publico tal como está su aporte a la historia de Quines en el libro “Noticias para la historia de los pueblos de San Luis” – Fondo editorial Sanluiseño – mayo de 1996


QUINES
(Departamento Ayacucho)

El topónimo derivaría del nombre del cacique gobernante en los últimos tiempos en que esos lugares fueron habitados por gente autóctona. Dicho cacique, según referencias recogidas de la tradición oral, se llamaba QUINE o QUINELA.

En el año 1947 al realizarse la encuesta de maestros para el IV Censo General de la Nación, tres maestros de la zona recogen la versión de la existencia del cacique Quinela. Son ellos Don Justo Edmidio Chaves, director de la escuela nacional Nº 237 “Las Higueras”; Doña María P.O. de Azcurra, directora de la escuela nacional Nº 200 “Baños del Zapallar”; y Gregoria G. de Aguirre Céliz, directora de la escuela nacional Nº 120 “Puesto Tobares”.
El topónimo QUINE tiene respaldo histórico. En efecto en diciembre de 1740 el Capitán Gerónimo de Miranda pide amparo en tierras de “Quine” que están “yermas y despobladas” (1) y otros dos viejos documentos de comienzos de siglo pasado aluden al lugar con el nombre de “Quine”. (2)

Familias fundadoras. Según referencias recogidas de la tradición oral, en 1780 los hermanos Alberto, Manuel y Juana Montiveros, se radicaron en el lugar. Doña Juana casó con Don Pablo Céliz, de tal suerte que las familias fundadoras del pueblo fueron Montiveros y Céliz, que se establecieron en la zona de la Plaza Vieja.

Aporte al Ejército de los Andes. En 1816 cuando se organiza el Ejército de los Andes, el Alcalde de Hermandad Don Manuel Montiveros recoge la contribución de reses, caballos y charqui de los siguientes vecinos de Quines: Luis Leyes, Alberto Montiveros, Farías el Viejo, Nicolás Sánchez y Santos Leyes. (3)

Declaración de la Independencia. En este mismo año de 1816, en el mes de noviembre, presidido por el citado Alcalde Don Manuel Montiveros, se realiza en Quines el juramento de la Independencia que había sido proclamada en Tucumán el 9 de julio. Firman el acta José Manuel Montiveros, José Santos Leyes, Juan Alberto Montiveros, Bartolo Luis Leyes y Julián Echeverría. Actúan como testigos dos personas de encumbrado prestigio en Santa Bárbara (hoy San Martín): Don José Marcos Guiñazú y Don Prudencio Vidal Guiñazú. (4)

Montoneras. En junio de 1830 Quines es invadido, igual que Santa Bárbara, por los montoneros. (5) El 29 de diciembre de 1870 Don José Nazario Céliz comunica que el comercio está muerto debido a las incursiones de las montoneras. No obstante ello se acaba de construir un molino. Dice que no hay artesanos y que sólo se dedican a la compra de frutos, Andrés Rosales, Felisardo Guiñazú, Rafael Suárez y Luis Mercado.

Hacendados. En 1844 se registran como hacendados en Quines los siguientes vecinos: Gregorio Romero, Laureano Olguín, Julián Ortiz, Fernando Becerra, Dionisio Andrada, Francisco Quiroga, Blas Fernández, Hilario Requelme, Domingo Escudero, Justo Pedernera, Santos García, Vicente Pedernera, José María González, Sebastián García, Ingacio Vílchez, Faustino Martínez, Alejo Montiveros, Gregorio Chirino, José Luis Sosa, Nieves Céliz, Nazario Céliz, Román Céliz, Juan Fernández, Bernardo Leyes, Manuel Leyes y Tomás Montiveros. Mujeres hacendadas: Juana e Isabel Montiveros, Petrona Ojeda, Antonia Chirino y Lucía Escudero. (6)

Delineación. La villa fue mandada a delinear en 1871 durante el gobierno de Don Juan A. Ortiz Estrada. Se tomaron como base nueve manzanas situadas en la banda oeste del Río Quines ya que la parte situada al este del referido río fue adquirida en propiedad por Don José Calixto Suárez y por Don Manuel de Rosas.
Quedó así trazada la Plaza Nueva. Al sur de dicha plaza se dejó media manzana para la iglesia, entre las propiedades de Don Pascual Funes y Don Santiago García. Al norte se ubicó Doroteo García, solar que después ocupó la Casa Blanchet. Al oeste Javier Alaniz, propiedad que después pasó a Don Adrián Lucio Lucero. Al este se afincaron Eduardo y Benito Leyes. En la esquina NE Don Justo Montiveros (abuelo del Dr. Agustín Ulasdislao Montiveros). En la esquina dela manzana SE edificaron Andrés Rosales y Tránsito Leyes, y la manzana SO quedó baldía durante mucho tiempo. Esta plaza se llama hoy “Lafinur”. En la iglesia de la Plaza Vieja se venera la Virgen del Rosario, cuya imagen fue donada por la familia Montiveros. En la plaza Vieja se habían establecido los Céliz, los Aguirre, los Quiroga y algunos Montiveros mayores. (7)

Iglesia. El 3 de agosto de 1864 desde San Francisco Don Juan Gregorio Guiñazú da cuenta de las dificultades (entre otras falta de madera a no ser de álamo; falta de agua y de obreros que quieran trabajar), para levantar la iglesia de Quines. Dice que ha hecho cavar un pozo balde para tener agua suficiente y que los albañiles y demás obreros vendrán de la provincia de Córdoba. Habla de cortar adobes. (8)
El 26 de agosto de ese mismo año 1864 desde Quines Guiñazú informa sobre los trabajos de la iglesia y dice que ya ha cortado las maderas, que tiene 14.000 adobes y que el pozo balde está por concluirse.
Dirigen también esos trabajos el síndico de la iglesia Don Justo Montiveros y el juez de Paz Don Nazario Céliz.

Comercio. En 1866 tiene en Quines negocio de tienda, almacén y pulpería, Don Crescencio Aguirre en sociedad con Don Rafael Suárez, como así también Don Pedro Nolasco Tello. (9)

Poder Judicial. En cuanto al Poder Judicial digamos que por decreto del 22 de diciembre de 1874 son nombrados en Quines juez de Paz Don Pascual A. Funes y teniente juez Don Nicomedes Alaniz. (10) El 4 de enero de 1884 son designados juez de Alzada Don Paulino Suárez, juez de Paz Don José Soria y juez de Paz suplente Don Javier Alaniz (hijo). (11) Por decreto del 30 de enero de 1886 es designado juez de Paz Don Pascual Funes por renuncia de Don José Soria. (12) El 1º de marzo de 1886 se acepta la renuncia de Don Pascual Funes y se nombra en su reemplazo a Don José Rivarola. (13) Por decreto del 2 de marzo de 1899 fueron designados juez de Paz Don Moisés Céliz y juez de Paz suplente Don Manuel Lencinas Conil. (14) Por decreto del 19 de julio de 1904 es designado juez de Paz y jefe del Registro Civil Don Augusto Fernández en reemplazo de Don Pascual B. Funes y por decreto del 16 de enero de 1905 son nombrados juez de Paz y jefe del Registro Civil Don Román Quiroga y juez de Paz Suplente Don Rosario Fernández. (15)

Cimisión Municipal. Para integrar la Comisión Municipal son designados por decreto del 28 de febrero de 1899 Rito M. Farías, Lucas E. Montiveros, José Alvarez, Cornelio P. Moyano y Calixto Fernández. En junio renuncian Don Lucas E. Montiveros, José Alvarez y Cornelio Moyano y el poder Ejecutivo dicta el decreto de fecha 22 de junio por el cual se nombra en reemplazo de aquellos a Paulino Suárez, Benito Leyes y Miguel Fernández. (16) En el año 1900 por no existir Comisión Municipal, por decreto 7 de junio son designados para integrarla Don Lucas Montiveros, José Alvarez, Paulino Suárez, Pascual B. Funes y Cristóbal Pereyra. (17)

Escuela. En 1864 la Comisión nombrada en Quines para buscar casa y preceptor a fin de instalar allí la escuela, integrada por José Nazario Céliz, Santiago Guiñazú y José de las Nieves Céliz, comunica que ha encontrado una casa para alquilar por 20 reales mensuales y propone como preceptor a Don Sinforoso Suárez, Dice además que hay 50 niños pobres en edad de recibir instrucción. (18)
El 16 de marzo de 1865 aquella Comisión comunica que a la Escuela de Varones asisten 30 niños y que no han llegado los libros prometidos. Dice que muchos alumnos que ya deberían estar escribiendo, no tienen papel, tinta ni plumas. Pide que se le paguen al preceptor los tres meses y veinte días que se le adeudan.
El 30 de agosto de 1865 el preceptor Don Miguel Michelet pide que se le abonen 100 pesos correspondientes a cuatro meses de sueldo. Informa que casi todos los alumnos ya saben escribir pero debido a la pobreza de los mismos y a que el gobierno no ha remitido los útiles, él está pagando de su bolsillo el papel que los niños utilizan.
El 31 de diciembre de 1865 la Comisión examinadora de las escuelas de Quines informa que en la escuela de varones no se ha podido completar el número de 50 alumnos por las incursiones de los bandidos. Tal Comisión estaba integrada por Don Bonifacio Suárez, Don Santiago Guiñazú y Don José de las Nieves Céliz.
En 1866 Don Miguel Michelet es Preceptor de la escuela de varones que había abierto sus puertas el 2 de noviembre de 1864 y que funcionaba en ese momento con 35 alumnos. (19) Don Miguel Michelet renunció en enero de 1866. (20)
El 15 de junio de 1869 se reinstalan en Quines las escuelas de varones y de niñas. A la primera asisten 34 alumnos y a la segunda 46.
El 19 de enero de 1870 el presidente de la Comisión de Instrucción Pública Don José Nazario Céliz comunica que por falta de salud ha renunciado la preceptora Gregoria Ortiz y que se ha dirigido a varias señoras de la localidad buscando reemplazante.
El 22 de junio de 1871 Don Manuel Marzoa que desempeñaba el cargo de subinspector, recibe con destino a la escuela, útiles y textos tales como el Silabario Argentino, Vida de Franklin, Trozos de Literatura, Lectura Popular, Tratado de las Obligaciones del Hombre, Recreo de las Niñas, Anagnosia, Historia de las Provincias Unidas, El Amigo de los Educandos, Niños Célebres, El Pequeño Economista, El Juicio por Jurado, Verdadera Organización del País.
Con fecha 8 de julio de ese mismo año, Don Manuel Marzoa comunica que las escuelas de niñas de Candelaria y Quines se han cerrado por renuncia de las preceptoras, hecho que ha motivado la queja general de las madres. Agrega que el 4 de julio se instaló la escuela de varones de Quines con poco menos de 50 alumnos.
El 25 de marzo de 1872 informa que el día 18 tan pronto se presentó el preceptor Don Julio Luis Negré, se instaló la escuela de varones en la casa de Don José de las Nieves Céliz, con 25 alumnos. Dice que el juez de Paz no obliga matricular a los niños y por esa causa no ha pedido la instalación de la escuela de niñas aunque ha convenido con la Srta. Sebastiana Arce que ésta se haga cargo del establecimiento.
Por acuerdo del 8 de enero de 1886 la Comisión de Educación presidida por Don Eulalio Astudillo nombra en la escuela de varones de Quines como preceptor a Don Antonio M. Gómez. (21) Por decreto del 16 de febrero de ese mismo año es nombrada subpreceptora de la escuela de niñas la Señorita Ermelinda Laborda. (22) El 28 de abril de 1886 por acuerdo de la Comisión de Educación es designada ayudante de la escuela de niñas, Regina Osán. (23)

Biblioteca. El 30 de junio de 1872 el Gobierno de la Provincia designa a las señoras Aurora Wilson de Céliz, Josefa Gatica de Guiñazú y Aniceta Guiñazú de Quiroga, para integrar la comisión de la biblioteca popular de Quines.

Registro Civil. En 1899 se crea en Quines el Registro Civil.

Cultivos. Por decreto del 20 de mayo de 1907 es nombrado encargado de los cultivos de caña de azúcar y arroz en Quines y Luján, Don Mauricio Fernández. (24)

Notas:(1) Archivo Histórico de San Luis, Expediente Administrativo Nº 1, 14-12-1740.
(2) Archivo Histórico de San Luis, Carpeta Nº 38 documento 3.906 y Carpeta Nº 74 documento 7.050, 20-2-1837
(3) Archivo Histórico de San Luis Nº 19 documento 2.466
(4) Archivo Histórico de San Luis Nº 20 documento 2.492
(5) Archivo Histórico de San Luis Nº 40 documento 4.024, 4.025 y 4.030.
(6) Archivo Histórico de San Luis, Carpeta Nº 98 documento 9.153.
(7) Datos proporcionados por el Dr. Agustín Uladislao Montiveros, Avda. Presidente Illia Nº 78, San Luis.
(8) Archivo Histórico de San Luis, Carpeta Nº 166 documento 18.240, 3.8.1864.
(9) Archivo Histórico de San Luis, Carpeta Nº 171 documento 19.180, 3-2-1866
(10) Boletín Oficial Año I marzo de 1875 Nº I pág. 14.
(11) Boletín Oficial 15 de enero de 1886 Nº 1.
(12) Boletín Oficial 1 de febrero de 1886 Nº 2 pág. 36
(13) Boletín Oficial 15 de julio de 1886 Nº 13 pág. 228
(14) Boletín Oficial 6 de mayo de 1899.
(15) Boletín Oficial 30 de enero de 1905.
(16) Boletín Oficial 15 de julio de 1899.
(17) Boletín Oficial 23 de junio de 1900. Págs 182/183.
(18) Archivo Histórico de San Luis, Carpeta Nº 166 documento 18.260, 19-8-1864
(19) Archivo Histórico de San Luis, Carpeta Nº 171 documento 19.171, 29-1-1866
(20) Archivo Histórico de San Luis, Carpeta Nº 171, documento 19.172, 30-1-1866.
(21) Boletín Oficial 15 de febrero de 1886 Nº 3 pág. 48.
(22) Boletín Oficial 1º de abril de 1886 Nº 6 pág. 97.
(23) Boletín Oficial 15 de mayo de 1886 Nº 9 pág. 150.
(24) Boletín Oficial 31 de mayo de 1907 pág. 48.



Rastreadores
En la zona norte de la Provincia se conoció otro famoso rastreador. 
Se trata de Don Francisco Flores, nacido en La Brea (una estancia cercana a Quines) que murió a los 96 años de edad, en completa lucidez. 
Era un estanciero acaudalado, de mucho prestigio en la zona y a quien acudían los vecinos y autoridades cada vez que debían encarar la búsqueda de alguna cosa perdida que se considerara de importancia. 

En cierta oportunidad se perdió un niño de cuatro años de edad de una estancia vecina a la suya. Esto ocurría en el año 1890 más o menos y la zona era boscosa, donde abundaban pumas, jabalíes, etc. 
Cincuenta hombres buscaban al pequeño y Don Francisco pedía que lo dejaran solo para no borrar rastros y él se comprometía a encontrarlo. 
Después de cuatro días y cuatro noches y siguiendo el rumbo que denunciaba la punta del pie sobre los pastizales, este rastreador encontró al niño "sano y salvo". 
¿Cómo se llamaba el pequeño? He aquí un nombre conocido por varias generaciones de puntanos: Alejandro Montiveros; profesor y político de gran prestigio que desarrolló su actividad docente en la ciudad de San Luis.

En otra ocasión fueron quemadas varias parvas de trigo y pasto a un señor Taurán de la localidad de Quines. La policía recurrió a Don Francisco Flores. 
El incendiario habíase alejado del lugar por una acequia llena de agua. Luego trepó tápiales y volvió a seguir por acequias hasta que llegó a su casa situada en pleno centro de la población. 
Don Francisco lo siguió hasta allí y cuando se enfrentó con él le dijo a la policía: "Acá está el autor". 
El hombre (un tal Quinteros) fue tomado preso y confesó en el acto su delito.
*Datos suministrados por Teófilo Lucero de Quines (S.L.)

Alejandro Montiveros nació en 1884 lo que significa que si tenía cuatro años, esto sucedió en 1888. La estancia vecina al cual se refiere Tobares se llama El Mollar.
Los padres de Alejandro son Manuel Reyes Montiveros y de María Cenecia Alaniz. Hermano de Agustín Uladislao Montiveros. Se casó con Juana Fernández y tuvieron dos hijos: Diógenes A. y Dora. 
Alejandro falleció en 1945 a los 61 años de edad. 
(Datos obtenidos de la Genealogía de la Familia Montiveros realizada por Marcelo García 25/11/2015)

Es oportuno decir que Don Francisco Flores era conocido como rastreador no sólo en Quines sino en toda la zona norte de la Provincia y que según mentas conocía por el rastro a todos los vecinos de su pago porque, según su propia explicación, "todos tienen una forma de pisar diferente".

* Referencia de Don José F. Lucero - "San José, Dpto. San Martín (S.L.)


Tabeadores
En Balde hay que citar a Desiderio Erasmo Rosales.
En Quines a Ramón Andino; Isaac Olguín; Goyo Rosas y Ángel Salcedo. 
*Datos de José Marcelo Lucero, de Quines (S.L.). 
En otros tiempos en esta misma localidad gozaron de fama de buenos tabeadores, Rosario Moreno y Luis Miranda.
En la zona aledaña hay que citar a Felipe Barzola de La Represita y Marcos García del Balde de García; este último notable tirador.
*Datos de Don José F. Lucero, de San José, Dpto. San Martín (S.L.). 

Curanderos
En el año 1949 resultaron complicados en un proceso penal Ana Sosa de Los Corrales y Juan Amaya de Quines, por denuncia de Francisca Agüero de Los Corrales.
En su declaración, la denunciante, Francisca Agüero (de edad "indefinida" según reza la pieza judicial) expresa que enfermó de la cintura y la atendió Anita Sosa (de Los Corrales, departamento Ayacucho) quien le aplicó
una inyección de alcohol en la nalga derecha y le dio un caja con sellos para que tomara uno por la mañana y otro por la tarde. Todas las mañanas debía "comparecer" a aplicarse una inyección, durante 7 días.
Sintiéndose más enferma acudió al espiritista Juan Amaya de Quines quien le dio unos sellos. Debía tomar uno a la mañana y otro a la tarde, más un frasco de una bebida para tomar una cucharada después de cada comida.
Al principio pareció mejorarse pero después se agravó y resolvió recurrir a la ciencia médica.
Francisca Agüero falleció en el Hospital de Caridad de esta ciudad en abril de 1949 y la acción penal se declaró prescripta.
*Archivo Judicial de la Pcia. de San Luis, Expte. Criminal Nº 739 Año 1950.

Otro caso es en el que actuó Juan Díaz, oriundo de Junín (provincia de Buenos Aires) quien fue sometido a proceso a raíz de una denuncia del doctor José Santos Ortiz.
Aquel curandero había atendido a un muchacho, Cristino Moreno de "El Zanjón", departamento San Martín, a quien le recetó una bebida y sellos de dos clases.
El Juez declaró prescripta la acción y absolvió a Juan Díaz.
*Archivo Judicial de la Pcia. de San Luis, Expte. Criminal Nº 426 Año 1948.

Nombres para recordar:
En Quines hay que nombrar a Doña Rosa Ruartes, fallecida a la edad de 92 años que gozó de fama de gran "médica". En cierta Oportunidad le trajeron de La Rioja una señora que venía "por delante" en el caballo pues estaba "tullida". A los treinta días la mujer viajó sana con su esposo "cabal o aparte" de regreso a sus pagos riojanos.
*Datos suministrados por Don Justino Ruartes de Quines (S.L.)

Carreras cuadreras
Juez de Cancha
Como puede apreciarse, la función de Juez de Cancha es de difícil desempeño y supone una grave responsabilidad. De allí que personas verdaderamente responsables rehuyan frecuentemente el cargo y no es extraño que a veces, aún de buena fe, el Juez de Cancha se equivoque.
Casos notables de Jueces de Cancha por su prestigio, su autoridad, su rectitud, y su conocimiento del Reglamento de Carreras, han sido en el Departamento Ayacucho: Adolfo Molina. Pedro Montiveros, Adolfo Montiveros, Máximo Rodríguez, Jorge Bello, Olegario Quiroga, Manuel Enriz,
Quicho Cortéz, Ibrahin Quiroga, Marcos Gatica, Tomás Ulloqui, Juan Correa, Moisés Ruiz, Raymundo Tulián, Salvador Segura, Felipe Aquín, Adolfo Molina, Tito Turri y Rufino Wanzo.
*Referencias del Escribano F. Dalmiro Ponce. Maipú Nº 669 San Luis; de Dn. Manuel Eduardo Silva, de 
Luján (S.L.); de Dn. Agustín Bar era, de Candelaria (S.L.); de José Marcelo Lucero, Teófilo Lucero, 
Tránsito Lucero, Gilberto Arce y Pepe Rivarola, de Quines (S.L.); de Demetrio Pereira Ruiz, de San 
Francisco (S.L.).

Corredores
Entre los corredores de más prolongada y destacada actuación debemos mencionar los siguientes por el departamento Ayacucho: Petronilo Fernández, Sebastián Jofré, Mateo Cabañez, Agustín Barrera (El Chinche) -uno de los corredores más famosos de la Provincia-, Dámaso Barrera, Vicente Cabañez, José María Fernández, Jesús
Cabañez y Fermín Funes.

El mate
...Hemos dicho al comienzo de este punto que el auténtico mate proviene de una cucurbitácea, y esto importa afirmar que los mates de plata, porcelana, asta, madera, vidrio, etc. son sustitutos del mate natural.
En poder de coleccionistas y no coleccionistas particulares existen verdaderos primores de mates de plata que ofrecen como detalles originales, bases en forma de platillo para servir los bizcochos u otras confituras. Otros poseían cajas de música o estatuillas en cuya cúspide se construía el recipiente. Sé por informe de la señora Josefina Lucero de Chaves, de "EI Paraíso", Departamento San Martín, que en la casa de Don Pilar Pereira de Quines, poseían un mate con una campanilla para llamar a la cebadora.
Todas estas variedades, muy originales por cierto, de mates de plata, salieron de las hábiles manos de los plateros de antaño que rivalizaban en 
inventiva y cuya fama dependía precisamente de la belleza y armonía de líneas 
que conseguían dar a sus obras manuales.
En épocas pasadas a cada hijo que se casaba se le regalaba el mate de plata con su correspondiente bombilla que se guardaba como una reliquia de familia y se usaba en ocasiones muy especiales.
*Referencia de la señora Haydée Etchever y de Sosa.

Arrieros
...El número de animales que integraban las tropas variaba
considerablemente según los productos que se transportaban y las distancias que se recorrieran.
Conforme a las referencias de Don Salvador Gatica de Luján (San Luis) la última tropa organizada que anduvo por el Noroeste de nuestra provincia fue la de Don Segundo Agüero, riojano.
Cuando los animales tenían algún problema en las extremidades y a fin de que fueran entrando en calor previo a la tarea de ensillarlos y cargarlos, se les hacían dar unas vueltas como si se tratara de la vuelta a la estaca.
En el momento de aperarlos y acomodarles la carga se les ataba la cabeza con un poncho.
Cada animal llevaba una carga equivalente a 60 kilos más o menos y según el tiempo, la estación, y el camino, se hacían 40 a 50 kilómetros de recorrido por jornada.
En la tropa iba un animal al que llamaban "el carguero" que era el que llevaba las árganas con charqui y vituallas.
*Datos de Don Salvador Gatica de Luján (San Luis).
El transporte de mercaderías a lomo de mula se hizo hasta comienzos de este siglo en que comenzaron a circular las tropas de carros.
*Datos de la señora María Inés Pérez Ligeón de Silva, de Luján (San Luis).
En cuanto a las arrías de mulas sueltas, que generalmente constituían grandes tropas que se llevaban a Bolivia, debemos decir que las más numerosas que se han conocido en la provincia fueron las que reunía en Quines Don Pilar Pereira. En la actualidad continúa esa actividad su hijo Don
Darío Pereira.
La compra de mulas la hacían directamente los señores Pereira o por intermedio de otras personas en todos los puntos de la provincia de San Luis y aun en provincias vecinas. 
Arrieros puntanos
De Candelaria Don Justino Ruartes nacido en Balde de los Torres, 80 años, quien en el año 1929 arreó con Don Tomás Arabel (actualmente 80 años) y Don Humberto Pereira (oriundo de Luján, actualmente 75 años, residente en
Corral de Isaac), una tropa de 1.500 novillos dividida en varias remesas, a través de la Pampa de las Salinas, con destino a San Juan.
*Datos de Don Teófilo Lucero, de Quines (San Luis) 
También de Candelaria debemos citar a Don Marcelino Gutiérrez. En Luján, Departamento Ayacucho, Don José Juri y Don Julián Sosa.
*Datos de la señora María Inés Pérez Ligeón de Silva.


Fuente:
Del libro Folklore Sanluiseño - Jesús Liberato Tobares - 1972

2 comentarios:

  1. recuerdos pasados de boca en boca por mis abuelos, mi madre que viviò en San Rosa de Conlara hata 1930. Unica tabarterìa de allì de TEODORO SILVA, Tilisarao, Concaràn. Naschel. Habrà algun libro de historia que relate la vida de entonces. Amo Santa Ros. Tengo 72 años. mi mail es : pekyregàs@gmail.com.

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    1. HOLA ROSA COMO ESTAS? YO NACI EN QUINES EN EL AÑO 1955. Y DESPUES EMIGRE A SAN MARTIN MENDOZA AÑO 1966. HASTA EL AÑO 1979. Y AHORA VIVO EN ROSARIO SANTA FE. SOY PROFESOR DE DANZAS NATIVAS FOLCLORICAS, HISTORIADOR, COREOGRAFO, Y GESTOR CULTURAL. TE MANDO MI ABRAZO GAUCHO. MIGUEL JOSE SALDAÑA

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