HISTORIA DEL HOSPITAL DE QUINES
Para comenzar a hablar del hospital de Quines, nos tenemos que situar
en el Barrio Matadero Viejo, más precisamente en la banda oeste del río Quines
a unos 200 metros en dirección oeste sobre calle 25 de Mayo. En este
lugar están actualmente la antena de telefonía y las
viviendas para los afectados por los destrozos del 1 de marzo de 2015.
Esta zona, si se quiere, era la segunda en importancia cívica ya que en
25 de Mayo y Saavedra, más precisamente en la casa que fuera de la familia
Galván, funcionaba la escuela provincial de varones y más allá del Hospital
estaba el Matadero Municipal.
La construcción era en parte de adobe y en parte de ladrillo. Fue médico
en este sitio el Dr. Juan Antonio Fernández Sotura que llegó a la localidad
entre los años 1914 y 1915. Trabajó también como médico particular y médico de
Policía en la zona de Quines, Luján, Candelaria y zonas aledañas. Su hijo Julio
Luis contó que cuando venían enfermos y quedaban internados (por no ser del
pueblo), ellos les llevaban comida que hacía su madre, Guadalupe González, para
ofrecerles.
El Dr. Sotura intervino en casos de epidemia de viruela (en Quines, el
Talita, Candelaria y otros lugares); y entre los años 1930 y 1931 hubo una
epidemia de diarrea que costó la vida de unos 70 niños. Intervino también en un
caso aislado de paludismo de un Sr. de Tucumán que hizo crisis aquí.
Sus últimas actuaciones las realizó en el Dispensario siendo
posiblemente en ese entonces Director del dispensario el Dr. Flores.
En 1918 actuó también el Dr. Ricargo Veiga Gómez (diplomado en España).
También era maestro.
Así cuenta su experiencia con este médico el Sr. Agustín Uladislao
Montiveros en el libro El Mollar (publicado en 1972):
“Estaba en segundo
grado cuando padecí una fiebre reumática que me retuvo varios meses en la cama
y me dejó su secuela, felizmente superada, por contar con un organismo fuerte.
Me asistió el Dr. Veiga Gómez, un médico español que no revalidó el título,
pero que según referencias de personas fidedignas había sido en su país
compañero de estudios del Dr. Romera, médico reválida de brillante actuación en
Mercedes (San Luis) durante varios lustros. El Dr. Veiga se hizo nombrar
después maestro de escuela en Quines, más, como empezó a beber, se desacreditó
en todo sentido …”
También se pueden nombrar en esos años a los Doctores de apellido Mesana
(Sin título) y Latini sin poder dar mayores aportes sobre los mismos.
El nuevo edificio ubicado en calle Sarmiento y San José
(actual Comisaría) tiene una larga historia y para saber algo de sus inicios
nos debemos remitir a la Sociedad de Beneficencia conformada por las damas
pudientes de la época.
Estas señoras -(dice María Delia Gatica de Montiveros en el
libro Rescatando la Memoria de la Mujer Puntana – 1988) estaban preparadas
espiritualmente para ejercer la asistencia social que requería la época cuando
pudo crearse la Sociedad de Beneficencia en septiembre de 1887.
El subsidio de la Beneficencia
Nacional fue el principal sostén. Las señoras, aconsejadas por sus síndicos, se
preocuparon en adquirir algunas propiedades, una de ellas para la construcción
de un hospital, anhelo prioritario de la naciente institución, en octubre de
1889, y un potrero de media cuadra adquirido en ese mismo mes y año que podía
dar a la beneficencia alguna renta, en concepto de pastaje. Adquirió asimismo
con título del 12 de setiembre de 1900 una casa con siete habitaciones de
adobes, pisos de ladrillo y tablas. (Fue aquí donde funcionó la escuela de
varones en la esquina sureste de la intersección de las calles San Martín y 25
de Mayo, o sea donde actualmente está el comedor Púntero).
A Quines llegó también el provechoso
influjo del Consejo Nacional de Mujeres de la República Argentina. Con fecha 22
de setiembre de 1901 la Presidenta de la Sociedad de Beneficencia quinense,
Sra. Lorenza S. de Suárez, se dirige a la señora Albina Van Praet de Sala
presidenta del nombrado Consejo, en una larga y bien pensada carta donde entre
otras cosas, responde a la solicitud de la señora de Sala por conocer la marcha
de la institución de Beneficencia de Quines. Y dice al respecto:
“Esta Sociedad no cuenta más que con muy pocos recursos,
solamente con la mínima subvención de cuarenta a cincuenta pesos nacional, mensual,
que la Lotería Nacional le administra”.
“La gran sequía por que atravesamos en esta provincia,
sigue causando una pobreza incalculable, como asimismo ocasionando muchas
enfermedades, y que en esta pedanía los recursos que dejo expuestos no son lo suficiente
para ellos”.
“Hace algunos años que esta Sociedad de Beneficencia
proyectó trabajar un hospital en épocas más propicias en todo sentido, pero
nunca se realizó. Actualmente esta Sociedad a fuerza de estrictas economías
tiene un valor de tres mil pesos nacionales, y en el mes de julio próximo
pasado firmó un contrato con un arquitecto para dar principio a la referida
construcción del hospital”.
“Si bien es cierto que los recursos que dejo expuestos
alcanzarán solamente a la quinta parte del valor del edificio, he creído
conveniente dar principio para evitar muchos abusos, y esperanzada en la
Providencia de Dios y de nuestros respetables superiores magistrados de la
República, que cooperarán en ayudar y alentar el ánimo de esta pobre Sociedad
de Beneficencia”.
En párrafos finales manifiesta: …
“quedaré sumamente grata siempre que le sea posible
comunicarme la marcha de ese Honorable Consejo que Ud. preside, y asimismo
aceptaré con sumo agrado sus esclarecidos conocimientos y buenos consejos”.
El hospital fue construido en los
primeros años del siglo XX. Su fábrica fue semejante a las de San Francisco y
Luján, que he conocido en sus últimos tiempos de servicio, todos pintados de
subido amarillo.
Se atendían enfermos en el Hospital,
enfermos en sus domicilios, huérfanos y menesterosos que recibían una “ayudita”
semanal.
Muchas mujeres de la Sociedad de
Quines dieron su tiempo y prodigaron sus sentimientos en la acción benéfica.
Entre ellas nombramos a: (*agrego algunas a la lista)
-Lorenza S. de Suárez (Fue presidenta
en 1901)
-Rosa Suárez de Pereira (Presidenta
en 1916)
-Felisa Fernández de Suárez (Presidenta
en 1916)
-Guadalupe González de Sotura,
(Esposa del Dr. Juan Antonio Fernández Sotura)
-Jovita Suárez de Taurant, (Nuera
del francés que llegó a ser intendente, Sr. Pedro Elías Taurant)
-Arminda A. de Arce (Presidenta
designada el 6/10/1946)
-Esther Aguirre Céliz de Salinas,
(Vice pres. comisión del 6/10/46)
-Hermelinda Arce de Rivarola
-Justina Leyes de Amaya
-Gregoria G. de Aguirre Céliz,
(Secretaria comisión 6/10/46)
-Manuela M. de Cabañez Arce (Tesorera
comisión del 6/10/46)
-Idalina G. de Ortiz Suárez
(Pro-secretaria comisión del 6/10/46)
-Andrea Montiveros de Morales, (esposa
de Camilo Morales y hermana mayor de Agustín Uladislao Montiveros)
-Catalina Montiveros de Arce, (Esposa
de José María Arce y hermana de Andrea Montiveros)
-María Coloma Tello de Nievas
-M. Amelia A. de Ortiz
-Balbina Ortiz Suárez de Arias
-Agustina Pereira de Suárez
-Norberta Godoy
-Aurestela Estrada
-Gregoria Fernández de Vera,
-María Magdalena Franco, (Hija de
Manuel Franco)
Con respecto a los terrenos adquiridos por la Sociedad de Beneficencia
se puede ver en el Registro de la Propiedad, tomo 11, del departamento Ayacuho,
página 45, Expediente Nº 1453 con fecha 10 de febrero de 1916 el Sr. Regalado
de los Santos vende por 200 pesos a la Sociedad de Beneficencia de Villa de
Quines, representada por su Presidenta la Sra. Rosa Suárez de Pereyra, una
fracción de terreno inculto cercado, ubicado en el radio Municipal. El terreno
tiene 129,9 metros por cada uno de sus costados con una superficie de 1 ha, 68
a y 74 ca. Y limita al norte con terrenos de las Sras. Feliciana F. de
Montiveros y de Juana de Ochoa; al este con terrenos del vendedor; al sur con
derechos que fueron de Paulino Blanco y al oeste con calle pública.
En 1952 este terreno se incorpora a la Dirección Provincial de Salud
Pública ya que el gobernador por derecho N 336G de fecha 18 de abril de 1950
declara incorporada la entonces Sociedad de Beneficencia de la Villa de Quines
a la Dirección Provincial de Salud Pública de conformidad con los artículos 5 y
6 de la ley 2150.
¿CUÁNDO SE INAUGURÓ?
La inauguración del Hospital en calle Sarmiento se puede situar entre el
15 de junio de 1934 y el 15 de junio de 1938 (periodo de gobierno del Sr.
Ricardo Rodríguez Saa) ya que en su obras figura la que dice “Se construyó el
Dispensario Antivenéreo en Quines”.
¿QUÍEN FUE SU PRIMER DIRECTOR?
Según los registros obtenidos, los datos permiten afirmar por el momento
que el primer director del viejo hospital fue el Dr. Juan Antonio Fernández Sotura ya
que antes de su llegada no se lograron encontrar médicos y en los censos
nacionales de 1869 y 1895 no figura ninguna persona que preste servicios de
salud, ni siquiera de manera informal como los siempre existentes curanderos y
parteras o matronas.
El primer director o fundador del dispensario, como expresa el historiador Jesús Liberato Tobares en el libro "Médicos y Boticarios Puntanos de Antaño" fue, José Santos Ortiz.
El primer director o fundador del dispensario, como expresa el historiador Jesús Liberato Tobares en el libro "Médicos y Boticarios Puntanos de Antaño" fue, José Santos Ortiz.
La Sra. María Leopolda Olmedo, una de las primeras enfermeras en el
nuevo hospital dijo que el primer director del nuevo hospital fue un médico
español de apellido Arnai; después estuvo el Dr. Ortiz y luego Sardo. También
estaba como médico el Dr. Amodey en esos años.
Haciendo referencia a su experiencia personal cuenta que fueron muchos
los partos que atendió en Quines, tanto en las casas como en el mismo Hospital.
Concurría también a la Maternidad en la casa de Guiñazú. Esa era como una sala
de primeros auxilios y no había internado para enfermos, estos estaban en el
Hospital en donde, además, se hacían algunas intervenciones quirúrgicas.
Con respecto a la Dirección ocupada por el Dr. José Santos Ortiz dice en el tratado
de la reunión de la Cámara de Diputados de Nación con fecha 3 de julio de 1946:
“En Quines, de
sobremesa, resolvió dar por terminadas las funciones del doctor José Santos
Ortiz y reemplazarlo en la misma forma, comunicándole tal resolución en una
nota que fue escrita y pasada por el copiador acá, en San Luis, sin fecha,
llenando este requisito con tinta, en Quines, el día de la visita del señor
interventor a ese punto…”
Este y otros párrafos anteriores da a entender que por cuestiones
políticas fue separado del cargo y haciendo referencia a su trayectoria dice
luego:
“El doctor Ortiz es un
profesional dignísimo, que ocupaba el primer lugar entre los directores de
dispensarios, pues había llevado el dispensario de Quines a un alto grado de
organización y eficiencia.”
*Luego el mismo documento se hace referencia a otras cuestiones de
salud, reclamando al gobernador el por qué…
“…nada dice sobre las
medidas que tomará para contener los estragos de la brucelosis, que en los
últimos dos años está adquiriendo proporciones alarmantes en la zona norte.”
“…no manda a techar el hospital de Quines,
devolviendo el cinc y demás materiales que la intervención Carranza retiró de
aquella localidad, a raíz de que un huracán arrancó los techos de aquel
edificio.”
En el Anuario de las provincias y territorios, publicado por Ediciones
Plot y cuyo título es “Album Biográfico” – Edición 1954 – Provincia de San Luis,
hay un completo resumen de cada una de las localidades de la provincia.
Con respecto a Salud nombra:
Centro de Salud Pública: Jefe Dr. Raúl G. Sardo.
Dispensario Polivalente Provincial: Jefe Dr. Teófilo Jacobo
PROFESIONALES
Médicos: Dr. José Santos Ortiz; Dr. Raúl G. Sardo; Dr. Teófilo Jacobo y
Dr. Juan Fernández Sotura.
Odontólogo: Dr. Assad S. H. de Nicolás.
Partera: Srta. María S. Nievas
Farmacias: “Ayacucho” de Severiano Rodríguez y “Del Pueblo” de Jovino
Fernández.
FARMACIA DEL PUEBLO de Jovino Fernández - Después Farmacia DURÁN
Imagen compartida por Mario H. Ibáñez por facebook el 12/05/17
Imagen capturada el 11/01/2013
Con respecto a las farmacias cabe destacar que Doña Manuela Montiveros de Cabáñez Arce, ejerció en Quines desde el 21/10/1944 hasta el 15/5/53 la dirección técnica de la Farmacia Ayacucho.
El día 7 de febrero de 1966 el Gobernador de la provincia de San Luis, Sr. Santigo Besso, con motivo de su visita a las poblaciones del norte, deja habilitada en horas de la noche, la farmacia de D.O.S.E.P (Dirección de Obra Social para Empleados Públicos) de la que será director el Sr. Severiano Rodríguez.
Estas imágenes muestran al Dr. Raúl Gofredo Sardo en pleno ejercicio de sus funciones.
En la sesión del día 4 de septiembre de 2007 la Cámara de Diputados de la provincia de San Luis aprobó por unanimidad con sanción definitiva el proyecto de Declaración el que vería con agrado que el Poder Ejecutivo designe con el nombre de "Doctor Raúl Gofredo Sardo" a la Sala de Primeros Auxilios a inaugurar en la Banda Este de la localidad de Quines, departamento Ayacucho.
El miembro informante del proyecto fue el legislador provincial Héctor Romero Alaniz.
El miembro informante del proyecto fue el legislador provincial Héctor Romero Alaniz.
UNA FOTO DE LA AMBULANCIA
Ambulancia de Quines estacionada frente a Plaza Crisóstomo Lafinur.
Calle Pringles esquina Sarmiento. A la izquierda "Casa Cuestas", tienda de Manuel Cuestas. A la derecha "Casa Nito" de Juan Zenón Godoy, más conocido como Nito Godoy. En esta esquina (lado derecho de la imagen) la casa de Carlos Lucio Lucero.
Referenciado por Edgardo Raúl Lima
*La casa de Carlos Lucio Lucero fue comprada luego por la Sra. María Angélica Ávila según testimonio de su nieto.
NOTICIAS:
22 de mayo de 2010 - sábado
San Luis:
informe Especial del Hospital de Quines con el Ministro de Salud
UN INFORME DEL PROGRAMA “LA OTRA CARA”
El programa se emite por los canales de cable de la provincia de
San Luis, en Quines no se ve este programa porque el cable de la localidad es
deficiente y no tiene un canal exclusivo para producciones locales,
por eso ante numerosos pedidos de la gente de la localidad reproducimos parte
del programa “La Otra Cara” con el informe especial del Hospital de Quines.
Hospital
de Quines: paredes rasgadas, baños inutilizados, pozos llenos. Falta mucamas y
gran número de trabajadores pertenecen a Plan de Inclusión y Pasantías que
deberían ser nombrados. Falta seguridad
Falta
de equipamiento: estufas, aire acondicionado ya que es una zona de calor en
verano y mucho frío en invierno, ropa de cama, colchas, luz de emergencia.
Videos
11 de mayo de 2011
EL GOBIERNO DE LA PROVINCIA ENTREGÓ AL HOSPITAL UNA AMBULANCIA EN QUINES
El ministro de Salud, Dr. Julio Quevedo, entregó el día miércoles una ambulancia y un equipo de rayos X portátil. Finalizado el acto, el ministro anunció que en breve se comenzará con las obras de refacción y ampliación del nosocomio y se reemplazará la máquina de Rayos X que actualmetne posee el hospital.
Junto a la directora, Natalia Masrramón, ralizaron un recorrido y se reunieron con el personal del establecimiento de Salud.
8 de junio de 2014
CONSTRUYEN UN HOSPITAL MODELO EN QUINES
El nuevo nosocomio tiene más de
2000 metros cuadrados y será clave para toda la región, ya que por sus
dimensiones podrá atender la demanda de la localidad y de zonas aledañas. La
obra significó una inversión de
$15.228.672,18 y está en la etapa final de construcción.
El
Hospital de Quines será un edificio modelo, que cumplirá con las Normas de Organización
y Funcionamiento de Internación y de Servicios de Salud, expedidas por el
Ministerio de Salud de la Nación.
La obra está en la etapa final de construcción.
Respecto
a las características del nuevo edificio, la jefa del Programa Obras de
Arquitectura, del Ministerio de Hacienda y Obras Públicas, Arq. Pía Pollio,
informó que para la edificación se utilizaron materiales regionales, en la
estructura general de la construcción, y materiales específicos y
reglamentarios según normativas para el correcto funcionamiento de este moderno
edificio.
La
funcionaria señaló además que serán más de 2000 metros cuadrados de superficie,
distribuidos en tres ingresos: (circulación principal, pública general y
urgencias), recepción, diagnóstico por imágenes, laboratorio, farmacia,
urgencias, área de apoyo técnico, área poli ambulatorio, informes, salas de
espera, morgue, SUM, administración, sanitarios y 14 consultorios.
También
habrá 10 habitaciones de internación con espacio para dos camas cada una. Cada
una de estas habitaciones, incluye espaciosos baños totalmente equipados.
La Directora del
hospital se refirió a la importancia de la obra
Marcela
Panario, directora del Hospital de Quines, destacó la importancia de la obra y
señaló que es muy esperada por los vecinos y por los profesionales del hospital
“es un gran hospital, el actual fue quedando chico, debido al crecimiento de la
población”.
Panario
señaló además que una vez inaugurado se sumarán más profesionales con distintas
especializaciones. “Va a contar con muchos más servicios y va a ser más
confortable para los pacientes y para los profesionales”, indicó la
funcionaria.
IMÁGENES CAPTURADAS EN OCTUBRE DE 2014
Desde esquina San José y Sarmiento.
Frente del Hospital
Tomadas desde el Hall o recibidor central hacia el pasillo con dirección oeste (calle San José)
Al final de este pasillo, mirando hacia el noroeste (esquina San José y Sarmiento) está a la izquierda el vacunatorio, al centro el consultorio de Psicología y a la derecha el consultorio odontológico. No se ve otra puerta hacia la derecha que da hacia el consultorio de talla y peso.
Desde el mismo punto mirando hacia el sur está hacia la derecha la Farmacia luego la sala donde durante varios años estuvo Rayos X y al fondo un baño para el personal. A la izquierda un patio interno.
Desde el Hall central con mirada hacia el este (calle Edison).
Por el lado este mirando hacia el sur. A la derecha están las oficinas Administrativas incluida la de la Directora del Hospital. Al fondo baños públicos.
Patio interno.
Capilla.
20 de noviembre de 2015 - viernes
EL GOBERNADOR POGGI INAUGURÓ EL NUEVO HOSPITAL DE QUINES
El gobernador de la Provincia, CPN Claudio
Poggi, encabezó el acto mediante el cual quedó formalmente inaugurado este
viernes el nuevo Hospital de la localidad de Quines. Se trata de una obra que
significó para el Estado una inversión superior a los $15 millones y que fue
construido de acuerdo a las normas nacionales e internacionales que rigen la
salud, sobre una superficie cubierta de 2000 metros cuadrados. “Quiero hacer un
reconocimiento al personal de este Hospital, que convive con el dolor y que
cura a cientos de personas cada día con gran vocación de servicio. También a
todo el pueblo que siempre me recibe con afecto, y quiero que sepan que ese
mismo cariño es el que yo les tengo. Nos vamos a seguir viendo”, destacó el
primer mandatario.
“Me siento orgulloso de la salud pública que tenemos y de
todos los avances que hemos tenido en este tiempo. El hospital público tiene la
obligación de atender la salud, pero si no nos enfermamos, mucho mejor. Por eso
los invitamos a cuidar nuestra salud, con las plazas saludables y todo el apoyo
al deporte, que forman parte del Plan Maestro de Salud, con el que buscamos la
prevención de las enfermedades”, agregó el gobernador antes de la inauguración
oficial del edificio ubicado sobre Valverde del Fresno y Ruta Nº 79. La
ceremonia fue a las 12:30 y convocó a cientos de vecinos que celebraron una
nueva obra para uno de los pueblos más grande del norte provincial.
El intendente de la localidad de Quines, Julio Gómez, le dio
la bienvenida a Poggi y a su comitiva que estuvo integrada por la ministra de
Salud, Marisa Pannocchia; el ministro de Hacienda y Obras Públicas, Néstor
Ordoñez; y varios ediles de pueblos vecinos: “Esto es el punto de inicio para
una mejor calidad de vida, y es el moño para cerrar una serie de obras que
hicimos en todo este tiempo, como el asfalto, la iluminación y la bicisenda
para que puedan llegar seguros al Hospital. Gracias por el apoyo, lo vamos a
extrañar gobernador”.
Por su parte, la responsable del Programa Obras de
Arquitectura, Marina Ortiz, ofreció detalles de una obra que se retomó en julio
de este año, luego de la firma de un decreto por parte del gobernador. Explicó
que el diseño contempló la utilización de materiales regionales y la estructura
estándar para este tipo de obras, culminando con un conjunto de
dependencias que se desglosan en tres ingresos: una recepción, sectores
destinados a diagnóstico por imágenes, laboratorio, farmacia, urgencias, área
de apoyo técnico, área poliambulatorio, informes, salas de espera, morgue,
salón de usos múltiples, administración, sanitarios, 14 consultorios y 10
habitaciones para internación con baños totalmente equipados.
La ministra Pannocchia destacó su alegría al inaugurar una
nueva obra que permite el crecimiento de la salud pública en la provincia y
agregó: “A lo largo de este año, la salud ha sido el eje que mayor atención ha
tenido en materia de inversión, capacitación e implementación de nuevas
estrategias al servicio de los habitantes”. Entre esos aspectos detalló las
refacciones de los hospitales de Buena Esperanza y de Concarán, como así
también la creación de la Unidad Renal que permitirá la realización de
trasplantes renales y la instalación del acelerador lineal para tratamientos en
el Centro Oncológico Provincial.
“Hoy damos otro paso con la inauguración de este hospital
modelo, diseñado para que cuente con mobiliario y aparatología de vanguardia,
donde podrán desempeñarse profesionales en distintas especialidades y donde no
solo se brindará atención al enfermo sino que también será un pilar para la
prevención. Este Hospital le pertenece a todas las familias de Quines, de su
zona de influencia y los que visiten la localidad. Los invito a cuidarlo”,
agregó la funcionaria.
La ministra recordó que la empresa adjudicada para realizar
la obra declaró su quiebra y esa situación alteró los plazos de finalización.
En julio la obra se retomó e iniciaron los trabajos tanto en el exterior como
en el interior del edificio. Entre ellos el desmalezado, recuperación de los
espacios exteriores y reparaciones en el cerco perimetral.
30 de junio de 2016
Instalan equipos para practicar la “telemedicina”
Están enlazados a una computadora central ubicada en el Policlínico de San Luis.
Se utilizará para hacer consultas y electrocardiogramas a distancia.
Esta prueba piloto servirá para evaluar resultados y si son positivos, la idea es instalarlos en todos los hospitales de la provincia.
Imagen tomada del Diario de la República
El Ministerio de Ciencia y Tecnología, bajo el concepto de “San Luis 3.0”, avanza con la conexión en establecimientos públicos, instalando, de esta manera, distintas herramientas y aplicaciones para mejorar la calidad de vida de los sanluiseños.
En nuestra localidad se instaló un electrocardiograma remoto que transmite los datos vía online hacia el Policlínico y desde allí la información es analizada en simultáneo por especialistas de la capital. Esto lleva la denominación de “telemedicina”.
También se está realizando una serie de ensayos entre el hospital de San Luis y el de Juana Koslay.
El jefe del Programa Gobierno Digital, Cristian Cano dijo: “Dentro de la política digital del ministerio, hay un capítulo que es de Salud 3.0, que contiene el proyecto de la telemedicina, el cual mejora considerablemente la atención porque los pacientes podrán ser examinados por su médico de cabecera o, en una situación crítica, por un médico de guardia y a la vez por un equipo de profesionales desde un centro de mayor complejidad."
30 de septiembre de 2016
EL HOSPITAL DE QUINES RECIBIÓ UNA NUEVA AMBULANCIA
En Terrazas se entregaron las nuevas unidades móviles desde donde partieron a los destinos asignados.
La inversión ascendió a los $12.762.900,00.
Las ambulancias están equipadas con tecnología de última generación y su adquisición y puesta en funcionamiento se enmarca en el plan de optimización de la salud pública.
El Dr. Riera manifestó que la unidad de traslado cuenta con un tubo de oxígeno incorporado y todo el equipamiento necesario para un traslado crítico.
El Sr. gobernador entregó en mano las llaves a cada uno de los destinatarios de las nuevas unidades móviles en presencia de ministros, legisladores y funcionarios de la cartera sanitaria.
“Hoy comenzamos a exteriorizar las inversiones, a contar y sobre todo a agradecer a todos los protagonistas del sistema de salud que trabajan sembrando esperanza con la seguridad que mañana va a ser mejor. A ellos les digo: gracias” -fueron las primeras palabras del jefe del Estado provincial-.
Por su parte, el Ministro de Salud, Marcelo Riera, con respecto a las posibilidades de que el centro de salud quinense tenga un quirófano, señaló: "Estamos pensando en un plan de cirugías descentralizado, con lugares donde su puedan realizar intervenciones quirúrgicas de menor complejidad y Quines está incluído".
Así mismo, confirmó la llegada de más profesionales para Quines. "En los próximos días se sumarán un médico generalista, un ginecólogo, un obstetra y un asistente social".
En cuanto a equipamiento para el hospital, se proveerá de dos electros digitales para el área de cardiología, en tanto que los bioquímicos recibirán tecnología precisa para que los análisis de laboratorio puedan ser digitalizados.
ARRIBO A LA LOCALIDAD
En la ruta N 20, al oeste de la rotonda, gran cantidad de pobladores, autoridades y trabajadores de la salud, esperaron ansiosos la llegada de la nueva ambulancia.
Una vez que llegó, la caravana ingresó a la localidad por calle Pringles, llegando a Plaza Lafinur y por Colón llegaron hasta plaza Hipólito Irigoyen para retornar por 9 de Julio y llegar finalmente al Hospital.
En un marco de verdadera algarabía y muchas capturas digitales, recibieron la nueva ambulancia en el nosocomio local, con la presencia del Intendente Municipal, Sr. Oscar Cesar Macías, los secretarios Lucas Macías y Carlos Brito y los concejales María Esther Ortiz, Nelson Flores y Diego García. También, participaron de la alegría, los Diputados Mario Alume, Carmelo Mirabile y Fernando Casas, así como importantes referentes de Compromiso Federal y público en general.
Ya en el Hospital, la Directora, Sra. Silvia Bustos, agradeció al Sr. Gobernador, al Intendente, y a los compañeros de trabajo y familia, por el apoyo brindado para que esto sea hoy, una realidad.
Por su parte, en nombre de todos los habitantes de la zona, el Intendente Oscar Cesar Macias, agradeció al Gobernador Alberto Rodríguez Saá y al Ministro de Salud Marcelo Riera por este gran aporte a la salud, que beneficiará a toda la región.
FUENTES e IMÁGENES:
- ANSL, Radio FM Fiesta, Radio FM Ciudad y Municipalidad de Quines.
María Nievas, ya en los últimos años de actividad como partera, la asistió en el nacimiento de Walter, mi hermano mayor.
Doña Leopolda (María Leopolda Olmedo) la asistió en el nacimiento de Duilio.
Y Amanda Agüero de Montiveros -después de Gatica- (casada con Alfredo Montiveros en primeras nupcias y con el "Negro" Gatica en segundas nupcias), la asistió en mi nacimiento. Ella era obstetra, recibida en San Luis.
- Javier, mi hermano menor, nació en Villa Dolores.
Después, por muchos años, fue partera Yudith Miranda de García. También obstetra.
Cuando vino Yudith, a la Sra. Amanda la mandaron a Luján ya que era de allá, pero también hacía partos en Quines.
¿Dónde se realizaban los partos?
Normalmente en la cocina-comedor o si había lugar, mejor, en la pieza. Era más cómodo para la partera y la madre que el nacimiento sea en la mesa. Para los tres hermanos que nacimos en Quines, se utilizó la misma mesa. ¿qué característica tenía? Suponía que más baja, pero no, era más angosta y un poquito más alta que lo normal.
- No recuerda mi mamá el motivo por el cual no iba a Hospital y optaba por los nacimientos en la casa. Claro, estos había que pagarlos. No se recibía la obra social en el hospital.
¿Cómo preparaban la mesa?
Ponían una frazada doblada, un toallón, un impermeable, una sábana y otro toallón.
Allí la madre, con ayuda de la silla, se subía y se acostaba en la mesa.
¿Que implementos eran necesarios?
Fuentoncito o bañadera de plástico, toallón para envolver al bebé. Le lavaba la cabecita, lo bañaba y lo envolvía bien. En la cama esta toda la ropa para el bebé.
¿Que ropa usaba el bebé?
Batita finita de batista (tela muy fina que también se utilizaba para hacer pañuelitos), camisetita y saquito (depende la época en que naciera).
El pañal de tela de batista y chiripá o pañal de bombasí. Primero se usaron los dos pañales grandes de tela cuadrados.
Sobre eso se colocaba la bombacha de goma. Luego este material cambió por plástico. Un plástico blandito como una telita.
Algunas bombachitas eran con los dos agujeros para las piernitas y otras, más caras, tenían la forma de chiripá y se sujetaban con dos brochecitos a presión.
Luego el osito, los demás abrigos y guantecitos para que no se rascaran la cara. Siempre usaban gorrita para que no le entre aire a los oídos ni a la moyerita.
* Doña María Nievas solicitaba a las madres una faja larga de algodón y con esta, sobre la bombacha de goma, envolvía al bebé de la cintura (a la altura del ombligo), hasta los tobillos con la faja. Por decirlo de algún modo "momificados de la cintura hacia abajo". El motivo, según ella, era para que no se le hiciera hernia de ombligo y que no se le enchuecaran o arquearan las piernitas.
Debían tener aproximadamente 12 pañales finos y 12 chiripás. Cuando llovía había que secarlos con la plancha.
El lavado era muy importante ya que tenías que enjuagarlo varias veces para que no quedara nada de jabón, sino se paspaba el bebé.
Algunas tiendas en donde se vendían indumentaria para los bebés eran las de Pedro Sosa, Cuestas y Marino en donde actualmente está Albertito.
Recuerdos de una querida vecina:
Dialogando con Marta Reina sobre esto, recuerda claramente dos acontecimientos que le tocaron vivir:
El primero que relató fue el haber asistido a una señora llamada Selva durante un parto. Fue en medio del patio y con todos los hijos como testigos directos. "Llegó el momento y no había medios para acercarla al hospital y tuve que arremangarme y manos a la obra. Movilicé a todos para que buscaran las cosas, saqué agua caliente que había en la olla, la entibié y me dispuse a recibir a la criatura. Le sobaba la panza y presionaba para ayudarla, después le pasé una sábana por arriba de la panza y se la ajusté para que no respirara para arriba. Apenas asomó la cabeza la tomé con cuidado y tiré despacito. La saqué y salió con el cordón. Medí cuatro dedos y lo corté. Me dieron un hilo blanco, lo desinfecté con alcohol y lo até bien fuerte. Al ratito tiró la placenta. Bañé el bebé, lo cambié y lo tapé. En ese momento me di cuenta que me temblaban las piernas y me di cuenta que todo lo que hice era lo que mi mamá me había explicado por si alguna vez pasaba. Le dije a Juan: -Andá al hospital y avisales que Selva tuvo el bebé para que vengan a verla. Mientras tanto le hice un té bien caliente y se lo di. Llegó el doctor, la miró y me dio un abrazo y me felicitó porque el bebé estaba muy bien y todo lo que había hecho estaba bien."
Marta me contaba que era muy común, en la primera mitad del siglo XX, los partos en posición de cuclillas.
Se colgaba un lazo en una vara del techo o de la galería que servía a la madre para sujetarse y poder hacer fuerza.
Esta posición era adoptada como más natural. Al bebé lo recibía la partera.
Si el parto venía muy difícil o la madre ya no tenía fuerzas para expulsar al bebé, se acostumbraba colocar la punta del cinto en la boca de la madre para que al hacer arcada, facilite la expulsión ya que ésta se transmite, inevitablemente a la parte baja del vientre.
- ANSL, Radio FM Fiesta, Radio FM Ciudad y Municipalidad de Quines.
- Libro Rescatando la Memoria de la Mujer Puntana – Maria
Delia Gatica de Montiveros - 1988 - Páginas 29 y 30.
http://agenciasanluis.com/notas/2014/06/08/construyen-un-hospital-modelo-en-quines/#
http://agenciasanluis.com/notas/2015/11/20/el-gobernador-poggi-inauguro-el-nuevo-hospital-de-quines/
DE PARTOS Y PARTERAS
El proceso de maternidad, desde la fecundación hasta la lactancia, pasando por la difícil prueba del parto, estaba cargado de misterios y de peligros. Misterios que se fueron transmitiendo de generación en generación hasta llegar casi al ridículo de los cuidados y peligros propios de cada lugar, de cada situación y de la realidad social por la que cada familia atravesaba.
El primer indicio para determinar el embarazo fue siempre la falta de menstruación, al que se le sumaba, como otra señal, el tono rojizo de la orina. Una prueba para determinar si la mujer estaba encinta era colocar, por la noche, un diente de ajo bajo la almohada; si al despertar la mujer notaba sabor a ajo en la boca la prueba se consideraba como positivo, o sea que estaba embarazada.
Varios fueron los términos que se utilizaron como: Embarazada, encinta, esperando familia o “gruesa” (palabra que popularizó José Luis Serrano en el personaje de Doña Jovita).
Para evitar los abortos, recomendaban practicar poco el coito, evitar caídas y golpes y no tomar laxantes.
En los primeros meses de embarazo se preparaban remedios considerados beneficiosos, uno muy común era hervir en aceite hierba del huerto, espinacardo, almáciga e incienso, esta mezcla se aplicaba sobre el estómago.
La salud del bebé también preocupaba, sobre todo si había sido concebido durante el período menstrual, pues decían que las criaturas engendradas, podían ser susceptibles de sufrir enfermedades como la viruela, el sarampión o la lepra.
Los síntomas de que nacería varón eran que la mujer se sentía ligera, tenía mejor apetito, el ojo derecho se movía más, la mejilla derecha engordaba pronto, adelantaba primero el pie derecho al andar, se hinchaba más la parte derecha del vientre y se movía antes.
Si no se daban estos indicios, sería una niña.
Los familiares y vecinos tenían una serie de pruebas para determinar si sería varón o mujer. Por ejemplo preparaban dos sillas con almohadones y debajo de uno colocaban un cuchillo que representaba al varón y debajo del otro una cuchara que representaba a la niña. Invitaban a la embarazada a tomar asiento y de acuerdo a la silla elegida se determinaba el sexo de la criatura. Cuantas veces se habrá dicho que si la panza era puntura era varón y se era redonda, nena. También si la panza está alta o baja, si la madre está más caderuda o no. Infinidad de supersticiones que solo se dilucidaban, en ese entonces, solo en el momento del nacimiento.
El parto era atendido por una o varias parteras o comadronas, mujeres que mezclaban conocimientos científicos, religiosos y hasta mágicos.
Llevaban en la mano tres granos de pimienta y recitaban una oración.
Cuando las contracciones eran más seguidas, se le daba a la parturienta un té con mezcla de diferentes hierbas y compuestos que eran beneficiosos para llevar a buen puerto el parto. Por ejemplo uno consistía en hacer hervir romero, albahaca, cedrón, orégano y a ese té se le colocaba un chorrito de caña dulce (bebida alcohólica). También cáscara de nueces para que tire bien la placenta y el “estuerzo”, una especie de compuesto blanco que suponían se formaba por el frío de los pies.
Si la madre fallecía durante el parto, la comadrona abría el cuello de la matriz y extraía al niño.
Antiguamente los partos eran un episodio muy complicado ya que apenas se podía disponer de ningún tipo de asistencia médica.
MEMORIA FAMILIAR:
Para completar esta sección acudí a la memoria de mi madre. Ella me contó su experiencia como madre y lo que se acostumbraba en los años 65 a 75 aproximadamente.María Nievas, ya en los últimos años de actividad como partera, la asistió en el nacimiento de Walter, mi hermano mayor.
Doña Leopolda (María Leopolda Olmedo) la asistió en el nacimiento de Duilio.
Y Amanda Agüero de Montiveros -después de Gatica- (casada con Alfredo Montiveros en primeras nupcias y con el "Negro" Gatica en segundas nupcias), la asistió en mi nacimiento. Ella era obstetra, recibida en San Luis.
- Javier, mi hermano menor, nació en Villa Dolores.
Después, por muchos años, fue partera Yudith Miranda de García. También obstetra.
Cuando vino Yudith, a la Sra. Amanda la mandaron a Luján ya que era de allá, pero también hacía partos en Quines.
¿Dónde se realizaban los partos?
Normalmente en la cocina-comedor o si había lugar, mejor, en la pieza. Era más cómodo para la partera y la madre que el nacimiento sea en la mesa. Para los tres hermanos que nacimos en Quines, se utilizó la misma mesa. ¿qué característica tenía? Suponía que más baja, pero no, era más angosta y un poquito más alta que lo normal.
- No recuerda mi mamá el motivo por el cual no iba a Hospital y optaba por los nacimientos en la casa. Claro, estos había que pagarlos. No se recibía la obra social en el hospital.
¿Cómo preparaban la mesa?
Ponían una frazada doblada, un toallón, un impermeable, una sábana y otro toallón.
Allí la madre, con ayuda de la silla, se subía y se acostaba en la mesa.
¿Que implementos eran necesarios?
Fuentoncito o bañadera de plástico, toallón para envolver al bebé. Le lavaba la cabecita, lo bañaba y lo envolvía bien. En la cama esta toda la ropa para el bebé.
¿Que ropa usaba el bebé?
Batita finita de batista (tela muy fina que también se utilizaba para hacer pañuelitos), camisetita y saquito (depende la época en que naciera).
El pañal de tela de batista y chiripá o pañal de bombasí. Primero se usaron los dos pañales grandes de tela cuadrados.
Sobre eso se colocaba la bombacha de goma. Luego este material cambió por plástico. Un plástico blandito como una telita.
Algunas bombachitas eran con los dos agujeros para las piernitas y otras, más caras, tenían la forma de chiripá y se sujetaban con dos brochecitos a presión.
Luego el osito, los demás abrigos y guantecitos para que no se rascaran la cara. Siempre usaban gorrita para que no le entre aire a los oídos ni a la moyerita.
* Doña María Nievas solicitaba a las madres una faja larga de algodón y con esta, sobre la bombacha de goma, envolvía al bebé de la cintura (a la altura del ombligo), hasta los tobillos con la faja. Por decirlo de algún modo "momificados de la cintura hacia abajo". El motivo, según ella, era para que no se le hiciera hernia de ombligo y que no se le enchuecaran o arquearan las piernitas.
Debían tener aproximadamente 12 pañales finos y 12 chiripás. Cuando llovía había que secarlos con la plancha.
El lavado era muy importante ya que tenías que enjuagarlo varias veces para que no quedara nada de jabón, sino se paspaba el bebé.
Algunas tiendas en donde se vendían indumentaria para los bebés eran las de Pedro Sosa, Cuestas y Marino en donde actualmente está Albertito.
A las madres que tenían el bebé normalmente no les permitían que se bañen por lo menos por cinco días. Una vez que se podían levantar se lavaban bien pero no se podían bañar. Permanecían en reposo y no podían hacer fuerza por cuarenta y cinco días.
A los bebés se los alimentaba con la leche materna y para esto también había recursos que aplicar. Por ejemplo si a la madre no le “bajaba” suficiente leche debía tomar agua hervida con cascara de papa o bien cerveza negra. Cuando le agarraba “pasmo” o nódulos no se debía poner aceite. Se hacía una crema con grasa de vaca y pimienta, se coloca en donde tiene las durezas y se hace mamar al niño mientras con un peine se pasa por la zona afectada y también se colocaba esta crema en la espalda, lugar donde se creía que nacía la leche.
Para evitar grietas en los pezones se colocaba grasa de vaca y al momento de amantar se limpiaba bien.
Para dejar de amantar se recurría a la pimienta, pimentón o al limón.
Cuando comenzaban a darle leche de vaca, normalmente la hervían con poleo o con hojas de tala para evitar que se empachen.
Se utilizaba mucho lo que se llamaba “Madre de leche”.
-¿En qué consistía?
Ante la imposibilidad de amamantar al bebé, se buscaba a una señora que en el mismo momento esté amamantando y llevaban al bebé en los horarios de la teta para que lo alimentara.Recuerdos de una querida vecina:
Dialogando con Marta Reina sobre esto, recuerda claramente dos acontecimientos que le tocaron vivir:
El primero que relató fue el haber asistido a una señora llamada Selva durante un parto. Fue en medio del patio y con todos los hijos como testigos directos. "Llegó el momento y no había medios para acercarla al hospital y tuve que arremangarme y manos a la obra. Movilicé a todos para que buscaran las cosas, saqué agua caliente que había en la olla, la entibié y me dispuse a recibir a la criatura. Le sobaba la panza y presionaba para ayudarla, después le pasé una sábana por arriba de la panza y se la ajusté para que no respirara para arriba. Apenas asomó la cabeza la tomé con cuidado y tiré despacito. La saqué y salió con el cordón. Medí cuatro dedos y lo corté. Me dieron un hilo blanco, lo desinfecté con alcohol y lo até bien fuerte. Al ratito tiró la placenta. Bañé el bebé, lo cambié y lo tapé. En ese momento me di cuenta que me temblaban las piernas y me di cuenta que todo lo que hice era lo que mi mamá me había explicado por si alguna vez pasaba. Le dije a Juan: -Andá al hospital y avisales que Selva tuvo el bebé para que vengan a verla. Mientras tanto le hice un té bien caliente y se lo di. Llegó el doctor, la miró y me dio un abrazo y me felicitó porque el bebé estaba muy bien y todo lo que había hecho estaba bien."
El otro episodio que relató fue el nacimiento de su primer hijo: “Estábamos en la casa de Domingo Giudice y los parteros fueron mis padres. La mamá trabajaba en el Matadero y se había olvidado de comprar kerosene y velas. Fue nada menos que para la tormenta de Santa Rosa que en esos años sí o sí había que esperarla y era terrible. Nos acostamos y como a las cinco de la mañana la despierto y le digo: Mamá no doy más de dolores. Se levantaron y al ratito nomás comenzó a nacer. El papá me puso un cinto arriba de la panza y lo ajustó para ayudar al nacimiento. Lo que nos alumbraba eran las luces de los relámpagos. Hace fuerza me decían y al ratito salió la cabeza, traté de seguir pero me quedé sin nada de fuerzas. No podía seguir, parecía que ya me moría y el papá con la punta del cinto me lo metió en la boca y al hacer la arcada terminó de salir. Fue un 11 de noviembre."
Varias fueron las parteras y como en el caso de Marta, muchas veces oficiaba de partera la propia madre, abuela o alguna vecina. Doña Felisa González de Altamira atendió el parto cuando nace Marta en El Silencio.
Marta me contaba que era muy común, en la primera mitad del siglo XX, los partos en posición de cuclillas.
Se colgaba un lazo en una vara del techo o de la galería que servía a la madre para sujetarse y poder hacer fuerza.
Esta posición era adoptada como más natural. Al bebé lo recibía la partera.
Si el parto venía muy difícil o la madre ya no tenía fuerzas para expulsar al bebé, se acostumbraba colocar la punta del cinto en la boca de la madre para que al hacer arcada, facilite la expulsión ya que ésta se transmite, inevitablemente a la parte baja del vientre.
LAS CREENCIAS NUNCA FALTAN
Con respecto al bebé y a las distintas etapas del crecimiento también hay creencias. Algunas perduran y otras quedarán solamente en la historia. Algunas de ellas son:- Al cortarle por primera vez las uñas hay que regalarle una pollita negra.
- El o la primera que le ve que le está saliendo el primer diente debe regalarle los zapatitos.
- "Para que se le pase el hipo hay que darles azúcar." FALSO: El hipo se pasa solo y la leche es el único alimento que puede ingerir hasta que el médico indique que puede comenzar con otros.
- "Hay que taparle la moyerita porque le va a dar aire." O: "No debe salir a la calle antes de los 15 días." Hay familias que acostumbraban salir con el bebé totalmente tapado y con gorrito de lana aún en pleno verano. La cuestión del aire o de las enfermedades que pueda contraer dependen del sentido común: No hay que exponerlos a personas estén resfriadas o tengan enfermedades contagiosas y seguramente les puede hacer mal exponerlos al sol o la "resolana" y al viento.
- "No hay que darles miel hasta los 5 años." VERDADERO: Muchas veces le ponen miel en el chupete para que lo agarre y puede ser muy dañino no solo porque el organismo no está preparado para recibir otro alimento sino que también porque la miel mantiene viva una bacteria llamada clostridium botulinum que al llegar al intestino se transforma el la toxina mas peligrosa. El botulismo del lactante (enfermedad producida por esta bacteria) no deja que los músculos se contraigan o sea que produce una parálisis flácida (dejan de funcionar los músculos). San Luis tiene un alto porcentaje de esta enfermedad. *La bacteria también se encuentra en la tierra y cuando está muy seco, flota fácilmente.
- "Si le salen rápido los dientes de leche será muy inteligente" FALSO: El crecimiento de los dientes no tiene nada que ver con la inteligencia.
- "Si lo rapas le crece el pelo más fuerte" FALSO.
- "Si se tira hacia atrás está ojeado."; "Si no toma la leche está empachado."; "Si tiene fiebre está insolado."; "Si tiene moradita la espalda es pata de cabra.". ¿VERDADERO o FALSO?: Hay malestares que la ciencia todavía no puede resolver o al menos no puede explicar. La cuestión es que si llevas el bebé para hacerlo curar "de palabra", misteriosa e inexplicablemente, en muchos de los casos, mejora casi al acto.
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